Un atentado del Estado Islámico al sur de Bagdad mata a decenas de peregrinos chiíes
- Un suicida ha hecho estallar un camión contra una estación de servicio
- Al menos 70 personas han perdido la vida, según las autoridades iraquíes
- La mayoría de las víctimas eran chiíes iraníes que volvían desde Kerbala
Un atentado suicida perpetrado con un camión bomba por el grupo terrorista Estado Islámico ha matado este martes al menos a 70 personas, en su mayoría peregrinos chiíes iraníes, que se encontraban en una estación de servicio de la localidad de Al Hala, al sur de Bagdad, según han informado las autoridades de Irak.
"Menos de diez eran iraquíes, el resto eran iraníes", ha declarado a la agencia AFP el responsable de seguridad del consejo provincial de Babilonia, Falah al Radhi. La agencia Efe señala que, además de los fallecidos, hay una treintena de heridos.
Los peregrinos chiíes volvían de Kerbala, la ciudad santa en la que conmemoran con un ayuno de 40 días el martirio en el año 680 del imán Husein ibn Ali, nieto de Mahoma y considerado el sucesor del profeta por los seguidores de esta rama del islam.
La estación de servicio atacada tiene un restaurante que es muy popular entre quienes viajan entre Bagdad y Kerbala y, según un oficial de la policía iraquí citado por la agencia Reuters, hasta cinco autobuses de peregrinos han ardido como consecuencia de la fortísima explosión.
Vehículos y edificios incendiados
Un residente de la zona, Abás Abdelhadi, ha relatado a Efe que se encontraba cerca de la gasolinera cuando se produjo una explosión "masiva" y "violenta", y posteriormente un intenso humo y llamas empezaron a elevarse y cubrir el lugar, lo que causó "terror" entre los presentes. La explosión ha causado cuantiosos daños materiales y ha incendidado no solo los vehículos, sino también edificios próximos al lugar del ataque.
El Estado Islámico, que defiende un visión extremadamente rigorista del islam suní y considera apostatas a los chiíes, ha reivindicado el ataque en un comunicado difundido por la agencia Amaq, vinculada a los yihadistas, que hablan en la nota de "más de 200 muertos y heridos, incluidos iraníes".
Los combatientes del Estado Islámico ocupan amplios territorios de Irak, especialmente en el noroeste del país, junto a la frontera con Siria, aunque las fuerzas iraquíes están recuperando terreno paulatinamente y desde finales de octubre están asediando su principal bastión, la ciudad de Mosul.
Como respuesta a la ofensiva del Gobierno iraquí, que cuenta con el respaldo de la coalición internacional que lidera Estados Unidos y con la colaboración de los peshmerga kurdos y de las milicias chiíes apoyadas por Irán, los yihadistas han redoblado sus ataques terroristas: este miércoles, el Estado Islámico perpetró varios ataques en diferentes barrios de Bagdad, que causaron al menos siete muertos y dieciocho heridos.