El orbitador de la Agencia Espacial Europea obtiene unas primeras fotografías "realmente nítidas" de Marte
- El satélite prueba con éxito su cámara e instrumentos de observación
- Los datos captados mejorarán su "software" y la calidad de las instantáneas
- Las operaciones científicas completas comenzarán en marzo de 2018
La Agencia Espacial Europea (ESA) ha señalado que las primeras pruebas de observación de los instrumentos y de la cámara del satélite ExoMars Orbitador de Gases Traza (OGT), que está en la órbita de Marte desde el 19 de octubre, han resultado satisfactorias.
La amplia elipse de su órbita lo lleva desde una altitud de entre 230 y 310 kilómetros por encima de la superficie marciana hasta una distancia máxima de 98.000 cada 4,2 días. Sus dos últimas órbitas, entre el 20 y el 28 de noviembre, las pasó por primera vez desde su llegada calibrando sus instrumentos y realizando las primeras observaciones de prueba, lo que ha ofrecido un avance del potencial que tendrá cuando esté plenamente operativo.
Entre sus objetivos se encuentra medir el flujo de neutrones creado por el impacto de los rayos cósmicos y efectuar mediciones complementarias para inventariar de forma detallada la atmósfera y, en particular, los gases presentes en cantidades mínimas.
El detector de neutrones, según ha indicado la ESA, ha demostrado que la detección se incrementa de forma notable cuando se está cerca de Marte. La cámara tomó también las primeras imágenes, que son ya "realmente nítidas", destaca la agencia, que añade que los datos captados servirán para mejorar su "software" y la calidad de las instantáneas tras haber sido procesadas.
"Estamos muy contentos y orgullosos de ver que todos los instrumentos están funcionando tan bien en el entorno marciano, y esto nos ofrece un avance fantástico de lo que podemos esperar cuando empecemos a recolectar datos de verdad a finales de año", apunta la agencia.
Proceso de "aerofrenado"
Tras el periodo de ensayos, que también servirá para probar la transmisión de los datos a la Tierra, la ESA añade que el esfuerzo volverá a centrarse en las operaciones y preparativos para el "aerofrenado" del año que viene, durante el que utilizará la atmósfera del planeta para llevar a cabo el cambio de su órbita gradualmente. Según el calendario previsto, las operaciones científicas completas comenzarán en marzo de 2018.
El satélite OGT incluía en su estructura el módulo de aterrizaje Schiaparelli, que estaba programado para realizar pruebas científicas en la misma superficie de Marte, pero se estrelló contra este planeta en su aterrizaje.
La ESA explicó que el accidente se produjo por un fallo en los controles de descenso del Schiaparelli, aunque se niega a tachar de fracaso la misión Exomars -organizada junto a la agencia rusa Roscosmos-, puesto que el OGT sigue orbitando en torno a Marte.