Puigdemont exige a Rajoy diálogo "sin condiciones" y el Gobierno le tiende la mano pero "dentro de la legalidad"

• El Gobierno promete a Cataluña "buscar el consenso" en el marco de la ley
• Puigdemont no tiene intención de acudir a la Conferencia de Presidentes
• Junqueras asistirá al Consejo de Política Fiscal y Financiera este jueves

El president de la Generalitat de Catalunya, Carles Puidgemont, en la reunión semanal del Govern

El presidente de la Generalitat catalana, Carles Puigdemont, ha exigido este miércoles al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, un diálogo "bilateral" y sin condiciones previas y ha denunciado que las "proclamas" y los "anuncios" del Gobierno del Estado en favor del entendimiento es posible que formen parte de una simple "operación de propaganda".

Así lo ha señalado Puigdemont, en la sesión de control al presidente catalán en el pleno de este miércoles en el Parlament. La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha tendido la mano al Govern catalán y ha prometido "buscar el consenso", aunque, eso sí, "dentro de la legalidad", al ser preguntada en estos términos por la diputada socialista Meritxell Batet, en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados.

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy (d), junto a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría (i), durante la sesión de control al Gobierno de este miércoles EFE/Ballesteros

De hecho, para enfatizar esa pretensión, Santamaría se ha comprometido a trabajar para "abrir" y "ensanchar" los cauces de diálogo existentes con la Generalitat de Cataluña. Asimismo, la vicepresidenta ha invitado al PSOE a trabajar conjuntamente en este sentido porque, ante el desafío catalán, "no caben las equidistancias", ha señalado.

Sobre estas palabras desde el Ejecutivo central, Puigdemont ha denunciado que por ahora no encuentra motivos para pensar que la mano tendida del Gobierno es sincera: "Mucho nos tememos que se quedará en un anuncio".

Una única condición: "Que no haya condiciones"

"El diálogo se ha proclamado pero no se ha producido, más allá del anuncio no ha habido nada más, un anuncio de diálogo no es dialogo", ha dicho también Puigdemont en respuesta a una pregunta de la presidenta del grupo parlamentario de la CUP, Mireia Boya, que le ha exigido no hacer caso de los "cantos de sirena" del Ejecutivo central.

El president se ha reafirmado en defensa de un referéndum acordado con el Estado, por lo que le "gustaría mucho poder establecer un diálogo con el Estado", con "una única condición: que no haya condiciones", ha subrayado.

Puigdemont ha justificado que no tenga intención de acudir a la conferencia de presidentes autonómicos que el Gobierno prevé convocar para enero, ya que a su juicio este foro, que no se reúne desde octubre de 2012, "no ha servido para nada".

¿Acercamiento?

Lo que dejan entrever las peticiones de ambos Ejecutivos es un posible acercamiento y rebaja en las tensiones por el conflicto Estado central-catalán, a pesar de que el pasado lunes el Parlament haya aprobado el proyecto de ley para los Presupuestos catalanes de 2017, que destinarán 5,8 millones de euros al referéndum independentista que propone el president catalán.

Tras la llamada de Puigdemont a Rajoy el pasado 2 de noviembre, con la que ambos se emplazaron al diáogo, en estos días se producirá una serie de reuniones encaminadas a ese objetivo.

Carles Puigdemont se reunirá por primera vez el próximo viernes con el nuevo delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo, para explorar qué recorrido pueden tener los llamamientos al diálogo, pese a las tensiones entre ambos ejecutivos por el proceso soberanista.

Por otro lado, el vicepresidente catalán y conseller de Economía, Oriol Junqueras (ERC), va a asistir mañana jueves en Madrid al Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF), en el que se tiene que fijar el objetivo del déficit y el techo de gasto de las comunidades autónomas hasta 2019.

El CPFF de este jueves será el primero al que asistirá la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, que presidirá la reunión, a la que irá también el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro.