Asad cree que la victoria de sus tropas en Alepo sería "un gran paso" hacia el fin de la guerra

• En una entrevista a un diario sirio recogida por la agencia France Presse
• "Alepo sería una gran victoria para nosotros (...) pero no significará el final"
• Descarta una tregua como han pedido los rebeldes

Imagen del presidente sirio, Bachar al Asad, durante la entrevista divulgada por la televisión pública alemana "ARD".

El presidente sirio, Bachar al Asad, considera que una victoria de sus tropas en Alepo no supondrá el fin de la guerra en el país árabe, aunque sí será "un gran paso" hacia su fin. Así se ha expresado en una entrevista al diario sirio Al Watan que se publicará este jueves pero que ya ha sido avanzada por la agencia France Presse.

"Seamos realistas, no significará el final de la guerra en Siria, pero será un gran paso hacia este fin", ha declarado Asad quien ha asegurado que nunca pensó en dejar ninguna zona sin "liberar".

En su opinión, la contienda "no acabará hasta la eliminación total del terrorismo, los terroristas están localizados en otras áreas, incluso si terminamos en Alepo, continuaremos la guerra contra ellos".

Rechazo a una tregua

Este miércoles, el Ejército sirio ha desalojado a los rebeldes del casco histórico de Alepo y estos han pedido una tregua humanitaria de cinco días. Pero el jefe de Estado sirio ha descartado una nueva tregua en esta localidad porque, a su juicio, beneficiaría a los "terroristas", ya que les daría un respiro y les permitiría reagruparse.

En Siria, después de tres semanas de asedio las tropas de Al Asad controlan la Ciudad Vieja de Alepo

Este lunes, Rusia y China vetaron en el Consejo de Seguridad de la ONU una propuesta de resolución, presentada entre otros países por España, para establecer una tregua de siete días y permitir así el suministro de ayuda humanitaria.

Al Asad ha indicado que una victoria en Alepo tendrá una importancia especial, porque "el proyecto turco" está basado en esta ciudad.

Confrontación militar con Turquía

"Turquía ha puesto todo su peso, así como su presidente (Recep Tayyip Erdogan) ha apostado todo al tema de Alepo, un fracaso en la batalla de Alepo significa que se dará la vuelta a la guerra", ha dicho.

“Cuando tratamos con alguien que psicológicamente no es normal (en referencia a Erdogan) no hay sitio para la lógica“

En ese sentido, el mandatario no ha descartado una posible confrontación militar con Turquía si continúa su intervención en el territorio sirio y ha dirigido duras palabras a su presidente.

"Cuando tratamos con alguien que psicológicamente no es normal (en referencia a Erdogan), no hay sitio para la lógica", se ha quejado Al Asad, quien ha señalado que lo lógico sería que Siria y Turquía tuvieran buenas relaciones, "pero con una intervención turca, Siria tiene derecho a defenderse".

Rusia, una relación especial

Respecto a los lazos con Rusia, Al Asad ha destacado que es una relación basada en los principios de respeto mutuo y en consultas.

"Ellos están con nosotros en la batalla real contra el terrorismo y en este caso nosotros y ellos somos socios", ha dicoh el presidente, quien ha subrayado que Moscú no ha pedido nada a cambio a Damasco por su respaldo militar.

No obstante, Al Asad ha adelantado que cuando comience la etapa de la reconstrucción, "en cuanto haya seguridad", serán "los estados amigos los primeros socios en este ámbito a través de sus compañías y préstamos".

Ha criticado, además, lo que ha calificado de postura "hostil" de los países del golfo Pérsico, como Catar y Arabia Saudí, y la de Occidente.

En cuanto al proceso para hallar una solución política al conflicto, Al Asad ha considerado que no se ha construido sobre negociaciones entre patriotas, sino entre "sirios patriotas y sirios marionetas". Y ha indicado que si el Gobierno tomó parte en ese proceso fue para "acallar los pretextos y demostrar a todos los estados que hablan de política y a Occidente, en particular, que no son honestos". A este respecto, ha descrito como "títeres" a los opositores que acudieron al diálogo con el Ejecutivo en Ginebra.