Los socialdemócratas vencen por amplío margen en las legislativas de Rumanía
- Tras un año en la oposición, el PSD vence con el 45% de los votos
- Promete aumentar salarios públicos, pensiones y bajar impuestos
- Su líder, Liviu Dragnea, está inhabilitado para ser primer ministro por fraude electoral
Tras pasar un año en el purgatorio de la oposición, el Partido Socialdemócrata (PSD) habría vencido este domingo por amplio margen en las elecciones legislativas celebradas en Rumanía, según los sondeos a pie de urna.
El PSD habría obtenido el 45% del sufragio, mientras que el Partido Nacional Liberal (PNL), que sostuvo en el último año junto con otras formaciones de centroderecha a un Gobierno tecnócrata dirigido por el ex comisario europeo Dacian Ciolos, habría logrado el 21% de los votos.
A los socialdemócratas no les ha pasado factura ni los numerosos casos de corrupción que salpican a su partido ni la dimisión del ex primer ministro Victor Ponta en noviembre de 2015 por las protestas tras el incendio en una discoteca de Bucarest que causó 64 muertes.
"Quiero decir a los rumanos que todo lo que presentamos en nuestro programa lo vamos a llevar a la práctica", declaró el líder socialdemócrata, Liviu Dragnea, tras conocer los resultados.
Aumentar salarios públicos, pensiones y bajar impuestos
El PSD ha prometido aumentar los salarios públicos, las pensiones, el gasto estatal y bajar los impuestos.
"Rumanía va a respetar todos los compromisos internacionales estratégico y económicos", agregó Dragnea en alusión a que Bucarest cumplirá con sus compromisos de estabilidad presupuestaria.
Pese a la clara victoria socialdemócrata, la presidenta del PNL, Alina Gorghiu, ha confiado en que en su candidato, Ciolos, aún pueda aspirar a ser primer ministro.
En tercer lugar se habría quedado la Unión Salvar Rumanía (USR), formada hace seis meses y que ha captado a muchos desencantados con un mensaje contra la corrupción y el nepotismo, y que habría logrado un 8% de los apoyos.
La Unión Democrática de los Magiares de Rumanía (UDMR), la formación de la minoría húngara, habría conseguido el 6%.
Además, dos partidos de centroderecha, la Alianza de los Liberales y Demócratas por Europa (ALDE) y el Partido Movimiento Popular (PMP), habrían superado por poco el umbral del 5% por ciento que les da representación parlamentaria.
Baja participación
La apatía dominó la jornada electoral con apenas un 39,49% de participación, dos puntos menos que los registrados en los comicios celebrados en 2012. La baja participación ayudó al PSD, cuyo voto, rural y de personas de edad, es muy fiel.
Mientras, sus contrincantes del centroderecha del PNL y la USR cuentan con respaldo en las ciudades, sobre todo de los votantes más jóvenes, y prometieron mantener la disciplina fiscal y promover la transparencia en la gestión de Gobierno.
Si se cumplen lo vaticinado por los sondeos, los socialdemócratas sólo necesitarán el apoyo de sus aliados del ALDE para lograr una mayoría sólida de más del 50 por ciento.
La gran incógnita es quién será el futuro primer ministro porque el actual líder socialdemócrata, Liviu Dragnea, tiene una condena por fraude electoral que según la normativa rumana lo inhabilita para el cargo.
El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, ya ha avanzado además que no propondrá a ningún candidato que haya sido condenado ni que esté bajo investigación.
Posibles candidatos a primer ministro
El PSD ha anunciado que no revelará ningún candidato hasta la inauguración de la nueva legislatura el próximo 19 de diciembre, aunque se barajan los nombres de los antiguos ministros Eugen Teodorovici y Rovana Plumb.
La Fiscalía Anticorrupción, la institución más valorada por los rumanos y que ha sido elogiada por la Comisión Europea por sus investigaciones a numerosos políticos, ha mostrado ciertos recelos por la posibilidad de que cambios legales dificulten su tarea.
Varios cargos del PSD han criticado a esa Fiscalía especial, han tachado sus investigaciones como políticas y la han comparado con la antigua policía política comunista.
Rumanía, que ha absorbido unos 26.000 millones de euros tras su entrada en la Unión Europea en 2007, tiene previsto crecer este año un 5,1 por ciento.
A pesar de eso, el país balcánico continua siendo el segundo con los ingresos más bajos del bloque, tras Bulgaria, con un salario medio de 460 euros.
Unos 18,8 millones de electores estaban llamados a las urnas para elegir a 466 diputados y senadores mediante un sistema de votación proporcional en el que los primeros resultados parciales se presentarán en la mañana del lunes.