Encuentran por primera vez evidencia de un modelo climático en un planeta fuera del Sistema Solar
- Detectan señales de fuertes vientos cambiantes en HAT-P-7b, a 1043,7 años luz de la Tierra
- El planeta nunca podría ser habitable, debido a sus sistemas meteorológicos violentos
- Un lado del planeta tiene una temperatura promedio de más de 2.500 grados centígrados
Astrónomos de la Universidad de Warwick, en Reino Unido, han detectado señales de fuertes vientos cambiantes en un planeta que está a más de 1.000 años luz de la Tierra, la primera vez que se halla un modelo meteorológico en un gigante de gas fuera de nuestro sistema solar.
El doctor David Armstrong, del Grupo de Astrofísica de Warwick, ha descubierto que HAT-P-7b está afectado por cambios a gran escala en los fuertes vientos que se mueven por todo el planeta, lo que probablemente conduzca a tormentas catastróficas.
Este descubrimiento se ha hecho siguiendo la luz que se refleja en la atmósfera de HAT-P-7b e identificando los cambios en esta luz, lo que demuestra que el punto más brillante del planeta cambia su posición. Este cambio es provocado por un chorro ecuatorial con velocidades de viento dramáticamente variables, con la más rápida empujando grandes cantidades de nubes a través del planeta. Las propias nubes serían visualmente deslumbrantes, probablemente formadas de corindón, el mineral que forma los rubíes y los zafiros.
El planeta nunca podría ser habitable, debido a sus sistemas meteorológicos violentos y extremas temperaturas. Un lado del planeta siempre se enfrenta a la estrella y permanece mucho más caliente que el otro, con una temperatura promedio de 2.860 grados Kelvin (2.586 grados centígrados).
Gracias a esta investigación, los astrofísicos pueden comenzar a explorar cómo cambian con el tiempo los sistemas meteorológicos en otros planetas fuera de nuestro sistema solar.
Usaron el satélite Kepler de la NASA
"Usando el satélite Kepler de la NASA, pudimos estudiar la luz reflejada por la atmósfera de HAT-P-7b, encontrando que esta cambiaba con el tiempo. HAT-P-7b es un planeta con una cara que está mirando siempre a su estrella. Esperábamos que las nubes se formaran en el lado frío y oscuro del planeta, pero se evaporaban rápidamente en el lado caliente", ha señalado el doctor Armstrong.
"Estos resultados muestran que fuertes vientos rodean el planeta, transportando las nubes desde el lado nocturno hasta el diurno. Los vientos cambian drásticamente de velocidad, lo que lleva a enormes formaciones de nubes que se acumulan y luego mueren. Esta es la primera detección del clima en un planeta gigante de gas fuera del sistema solar", ha subrayado.
Descubierto por primera vez en 2008, HAT-P-7b está a 320 parsecs (1043,7 años luz) de nosotros. Es un exoplaneta un 40% más grande que Júpiter y 500 veces más masivo que la Tierra y orbita una estrella un 50% más masiva y dos veces más grande que el Sol.
El trabajo, cuyos detalles se revelan este lunes en un artículo publicado en Nature Astronomy, fue dirigido por la Universidad de Warwick y realizado por un equipo de científicos de Warwick, Queens University Belfast, Dublin City University y University College London.