Bombas contra hospitales, así en Alepo como en Madrid
- Médicos Sin Fronteras recrea un ataque aéreo en el Hospital de La Paz
- Más de un centenar de centros médicos han sido atacados a lo largo de 2016
- "La comunidad internacional ha fracasado estrepitosamente en protegerlos"
Las sirenas son el presagio de lo que enseguida vendrá: primero, el rugido de los aviones, después, las ráfagas de disparos; lo último, las explosiones, que terminan de convertir el hospital en un edificio en ruinas repleto de víctimas, sanitarios y pacientes. Decenas de centros médicos en Siria, Yemen, Ucrania o Afganistán han sufrido esa suerte en los últimos años, en los que los hospitales se han convertido en objetivo de las partes en conflicto.
Ese horror es el que Médicos sin Fronteras ha querido recrear este martes en el Hospital General de La Paz, en Madrid, con una proyección sobre la fachada del centro y ante la mirada de unas 200 personas que se han congregado para vislumbrar, siquiera por unos momentos, la cruda realidad de la guerra.
"En los dos últimos años, estos ataques han pasado de inevitables a algo perversamente aceptable en las guerras", ha denunciado el director general de la organización en España, Joan Tubau, que ha señalado la ciudad siria de Alepo como el último ejemplo de esa trágica serie.
Siria, el país con más ataques
"Los hospitales del este [la zona controlada por los rebeldes] han sido atacados sin descanso con el objetivo perverso de negar la atención médica a la población en los momentos más duros de la guerra. Es una estrategia cínica, cruel e inhumana que persigue la victoria militar a cualquier precio", ha remarcado Tubau, justo el día en el que las fuerzas gubernamentales sirias acaban con los últimos focos de resistencia de la oposición en Alepo.
En Siria, este año se han registrado 120 ataques contra instalaciones sanitarias, aunque el año pasado fue aún peor, con 135. En Yemen, el Comité Internacional de la Cruz Roja ha contado 160 ataques a hospitales, clínicas y personal médico desde que comenzó la guerra entre el Gobierno y los rebeldes hutíes, en marzo de 2015.
En total, según los datos de la Organización Mundial de la Salud recogidos por MSF, en la primera mitad de 2016 ha habido 113 ataques contra centros médicos en distintos conflictos por todo el mundo, que han dejado 185 muertos y 296 heridos.
Los últimos refugios en tiempo de guerra
"Esto pasa en hospitales como La Paz de manera casi cotidiana", ha remarcado Tubau, mientras los propios pacientes del centro madrileño se asomaban a las ventanas para ver la proyección del ataque simulado.
Médicos sin Fronteras ha destacado, en este sentido, que los hospitales y el resto de centros médicos son un refugio para la población civil que sufre los conflictos armados, "los últimos espacios de humanidad" en medio de la desolación de la guerra, más allá de que las agresiones contra instalaciones sanitarias conculque el Derecho Internacional Humanitario.
“La comunidad internacional ha fracasado estrepitosamente a la hora de protegerlos“
"La comunidad internacional ha fracasado estrepitosamente a la hora de protegerlos. Las declaraciones de Naciones Unidas se quedan en nada, nuestros Gobiernos no exigen responsabilidades y los ataques continúan sembrando la muerte de inocentes", ha lamentado Tubau, que ha concluido: "Incluso la guerra tiene sus reglas y deben respetarse siempre; nunca se puede bombardear un hospital".