Competencia afirma que prohibir la economía colaborativa es "comprar tiempo" y pide un marco regulador
- La CNMC, preocupada por las prohibiciones de autonomías y ayuntamientos
- "No podemos poner límites a lo que no tiene límites", afirma Marín Quemada
- La patronal del taxi acusa a Uber de querer "copar el mercado del taxi"
- La plataforma se declara como una mera alternativa a las redes de transporte
- El sector hotelero y HomeAway discrepan también sobre los pisos turísticos
El presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), José María Marín Quemada, ha defendido este martes que las actuaciones destinadas a prohibir la economía colaborativa solo sirven para "comprar tiempo" y ha reclamado un marco regulatorio para un fenómeno "imparable".
Marín Quemada ha clausurado las jornadas Los nuevos modelos digitales de prestación de servicios y la economía colaborativa, organizada por la CNMC y la Fundación de Cajas de Ahorros (Funcas) y en la que han participado plataformas como Uber y HomeAway junto a la patronal del taxi y el sector hotelero.
El presidente de la CNMC ha explicado que desde el regulador están "preocupados por las actuaciones realizadas por diversas administraciones [autonómicas y locales] dirigidas a prohibir inicialmente a sectores de la economía digital su desenvolvimiento".
En su opinión, estas actuaciones "está dirigidamente simplemente a comprar tiempo" y la compra de tiempo "hay que identificarla inmediatamente con la pérdida de oportunidades".
“No podemos poner límites a lo que no tiene límites“
"No podemos poner límites a lo que no tiene límites", ha añadido Marín Quemada, quien cree que los reguladores deben actuar con "prudencia" y "mesura" pero sin eludir responsabilidades. De lo contrario, asegura, se perderían oportunidades para preparar a las empresas ante el fenómeno de la economía colaborativa, que "lo que está señalando son oportunidades de negocio para todos", también "para los sectores más tradicionales".
Competencia pide "un buen marco regulador"
El presidente de la CNMC ha subrayado que es necesario "un buen marco regulador" de la economía colaborativa con una doble finalidad: contribuir a suavizar el tránsito de la economía tradicional hacia los nuevos modelos y garantizar que las nuevas plataformas cumplen con sus obligaciones, según detalla Europa Press.
Sin embargo, el choque entre los sectores tradicionales y los nuevos modelos se ha vivido en las propias jornadas esta mañana.
“El sector del taxi no puede convivir con empresas como Uber“
El secretario técnico de Fedetaxi, Emilio Domínguez, ha afirmado en su intervención que el sector del taxi "no puede convivir" con empresas como Uber, que pretenden "privatizar la movilidad, quitando competencias reguladoras a los ayuntamientos y cercenando los derechos de los usuarios".
Plataformas como Uber, ha añadido, "intervienen en el mercado, fijan precios y vinculan a los conductores", lo que las aleja del modelo de economía colaborativa: "Uber se vende hippie y cool, al paso de las nuevas tecnologías, cuando lo que busca es copar el mercado del taxi".
Uber defiende que su modelo es la economía digital, no colaborativa
El director de relaciones institucionales de Uber en España, Ildefonso Pastor, ha explicado que su plataforma sigue un modelo de economía digital -en busca de un beneficio económico- y no colaborativa, y ha criticado que desde el sector del taxi se defienda esta "idea equívoca", informa Efe.
“Modelos como Uber fomentan la competencia a la baja en los precios“
"Uber aprovecha el potencial tecnológico para garantizar una mayor rotación de vehículos y mayores tasas de ocupación, lo que incrementa los ingresos por hora trabajada de los conductores", ha señalado Pastor.
Desde Uber han defendido que su plataforma no busca sustituir ningún modelo, sino ser un "simple complemento" a las redes actuales de transporte. Pastor ha señalado que modelos como Uber "fomentan la competencia a la baja en los precios", porque "contribuyen a un uso más eficiente de los recursos", lo que "puede no gustar a otros operadores".
En Madrid Uber volvió a operar esta primavera después de que la justicia suspendiera temporalmente su actividad como un servicio de conductores profesionales con licencia.
El sector hotelero contra plataformas de pisos turísticos
La Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) ha denunciado en las jornadas que el número de plazas en pisos turísticos sin regular ofrecidos en plataformas digitales supera ya a las que ofertan los establecimientos reglados, lo que fomenta un "modelo turístico saturado y poco regulado".
Benito ha concretado que, según diferentes estudios, en España hay 2,7 millones de plazas en pisos turísticos sin regular, frente a 2,4 millones que sí están en regla.
La presidenta de la FEHM atribuye esta diferencia a la postura "poco firme" de la Administración, que "solo ha implantado poco más de ocho normativas a este sector, frente a las más de mil a las que deben responder los pisos turísticos tradicionales (reglados)".
HomeAway acusa a la patronal de no usar datos reales
El director de relaciones públicas de HomeAway, Joseba Cortázar, ha negado la postura de la FEHM y ha criticado la utilización de las cifras que maneja la patronal hotelera, que son como un "mantra" para decir que las plataformas digitales "van a copar" el mercado hotelero convencional.
Cortázar ha explicado que los 2,7 millones de plazas en pisos turísticos en portales digitales como HomeAway o Airbnb "no es una cifra real, porque se contabilizan anuncios en plataformas y no el número neto de pisos, obviando que entre el 35 % y el 45 % de la oferta está duplicada en varias plataformas".
"Para criticar, hay que aportar datos reales", ha afirmado Cortázar, quien se ha preguntado si el sector hotelero tradicional está realmente exento de contribuir al turismo de masas.