Enlaces accesibilidad

Trump elige a David Friedman, un judío ortodoxo de extrema derecha, como embajador en Israel

  • Friedman cuestiona la solución de dos estados, uno israelí y otro palestino
  • Alineado con la extrema derecha, defiende trasladar la embajada a Jerusalén

Por
Imagen de archivo de la embajada de Estados Unidos en Israel
Imagen de archivo de la embajada de Estados Unidos en Israel

El presidente electo de EE.UU., Donald Trump, ha anunciado este jueves que ha elegido al abogado David Friedman para que represente al país ante el Gobierno de Israel. Friedman, que fue uno de los principales asesores de Trump durante la campaña electoral, es un judío ortodoxo con alineado con la extrema derecha israelí. Como su asesor de campaña durante las elecciones ha cuestionado la solución de dos estados en el conflicto palestino-israelí y ha comparado a los judíos de izquierda en EE.UU. con los judíos que ayudaron a los nazis en el Holocausto.

El equipo de transición de Donald Trump ha dado cuenta de este nombramiento mediante un comunicado oficial y ha indicado que el futuro representante del Gobierno de Washington ante Israel "mantendrá la relación especial" entre ambos países.

Judío ortodoxo más a la derecha que Netanyahu

Todos los embajadores estadounidenses designados por la Presidencia de Estados Unidos necesitan ser confirmados por el Senado.

Friedman, de 57 años, es actualmente socio fundador de una firma de abogados que tiene cerca de 300 letrados y que en los últimos 35 años se ha especializado en litigios y bancarrotas, ha recordado el comunicado oficial.

Colabora como columnista en dos medios de comunicación israelí situados en la derecha política, Arutz Sheva y The Jerusalem Post. Según el diario Haaretz, sus posiciones están más a la derecha que las del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

Friedman, cuyas opiniones contrastan con décadas de política estadounidense hacia Israel, no esperó mucho el jueves para señalar su intención de rebajar el enfoque estadounidense. En una declaración recogida por el equipo de transición Friedman confía en que pueda trabajar desde la embajada de Estados Unidos "en la eterna capital de Israel, Jerusalén".

El traslado de la embajada a Jerusalén, un asunto sensible

La actual administración estadounidense no reconoce a Jerusalén como la capital de Israel por las disputas que existen entre palestinos e israelíes acerca de esa ciudad. De hecho, al igual que muchos países, Estados Unidos mantiene su embajada en Tel Aviv.

El Congreso se ha manifestado a favor de que la capital israelí sea Jerusalén, pero en junio de 2015 la Corte Suprema de Justicia respaldó la posición de la Administración de Barack Obama.

En una reunión que tuvieron Trump y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el pasado 25 de septiembre, el entonces candidato presidencial republicano prometió reconocer a Jerusalén como la "capital indivisible" de Israel.