Los presupuestos catalanes salvan el primer trámite con el apoyo crítico de la CUP
- La CUP presta dos votos en la Mesa del Parlament para rechazar las enmiendas
- Pese a la admisión a trámite, los antisistema no garantizan el 'sí' a las cuentas
Los presupuestos del Govern para 2017 han superado este martes la admisión a trámite en el Parlament de Cataluña con el apoyo crítico de la CUP, que ha prestado dos de sus votos para rechazar las enmiendas a la totalidad de la oposición, aunque no ha garantizado su 'sí' a la aprobación definitiva de las cuentas.
A diferencia del debate sobre el proyecto presupuestario para 2016, tumbado desde el primer momento al sumarse la CUP al frente opositor -lo que obligó al presidente catalán, Carles Puigdemont, a someterse a una cuestión de confianza-, esta vez los anticapitalistas han permitido la tramitación de las cuentas: sólo dos de sus diez diputados -los imprescindibles- han votado, junto a los 62 de Junts pel Sí (JxSí), en contra de las enmiendas, mientras que los otros ocho se han abstenido.
Una vez admitidos a trámite, los presupuestos de la Generalitat inician un camino que los llevará primero al debate a la totalidad, entre el 16 y el 20 de enero, de las diferentes secciones presupuestarias en cada una de las comisiones parlamentarias, antes de volver al pleno para su aprobación definitiva, hacia el 8 o el 9 de febrero.
En su intervención inicial para presentar los presupuestos, el vicepresidente del Govern y conseller de Economía, Oriol Junqueras, ha evitado cualquier alusión a la CUP o al referéndum previsto para 2017, para el que se reserva una partida de 5,8 millones de euros.
El silencio de Junqueras para no dar pie a ningún encontronazo con la CUP contrasta con las reiteradas advertencias del presidente catalán, Carles Puigdemont, o de la portavoz del Govern, Neus Munté, que ha insistido en que si los presupuestos chocan con un veto habrá adelanto electoral, aunque ese es un escenario que por ahora "ni se plantea".
Para el PP son unos presupuestos "anticatalanes"
Pese a garantizar la tramitación de unas cuentas negociadas durante semanas entre el Govern y los anticapitalistas, la diputada de la CUP Eulàlia Reguant ha alertado de que son aún "demasiado continuistas" y ha retado al ejecutivo catalán a "ir más allá" y demostrar que desea "construir una nueva república con criterios distintos a los autonómicos".
También ha calificado los presupuestos de "continuistas" el portavoz de Catalunya Sí Que Es Pot, Joan Coscubiela, quien ha acusado al Govern de utilizar el proceso soberanista como pretexto para no hacer una reforma fiscal.
Desde la oposición, el diputado de Ciudadanos Antonio Espinosa ha considerado que los presupuestos son una "ficción", en "sintonía" con la "ficción" de la independencia, al prever partidas para un "nuevo y fracasado 9N", y ha recalcado que rechaza que se destine "ni un solo euro" a tal fin.
La portavoz adjunta del PSC en el Parlament, Alícia Romero, ha tachado de "irresponsable" a Junqueras, al que ve "atrapado" por la CUP y el proceso soberanista, y ha denunciado que los presupuestos reflejan "un modelo de sociedad conservador basado en el del presidente Pujol".
El portavoz parlamentario del PPC, Alejandro Fernández, ha reprochado a Puigdemont que haya decidido "inmolarse" al aceptar el "chantaje" de la CUP en unos presupuestos "anticatalanes", pensados para un proceso independentista "de destrucción masiva".
Por su parte, el portavoz adjunto de JxSí, Roger Torrent, ha defendido que los presupuestos son una "palanca de cambio para construir la república catalana" y ha criticado la visión "catastrofista" de la oposición.