Los refugiados de Berlín piden que no se empañe su imagen tras el atentado
- La detención de un refugiado como sospechoso de ser el conductor del camión pone en cuestión la imagen de los inmigrantes
- El centro de Tempelhof, donde se alojaba, ha sido registrado por la policía
- Ibrahim, un refugiado sirio, pide que no se "generalize" con los refugiados
- Más de un millón de personas han llegado a Alemania en los dos últimos años
Un grupo de refugiados de Berlín ha pedido a la población alemana que no se cree una sospecha constante sobre los inmigrantes, después de que este martes la policía registrara el centro en el que se viven actualmente. Este lugar había sido el hogar del hombre arrestado en un primer momento, y posteriormente liberado, como principal sospechoso de ser el conductor del camión que arrolló este lunes a una multitud de personas en un mercado navideño berlinés.
"Por supuesto que estamos preocupados", afirma Ibrahim Sufi, un sirio de 26 años que vive en el hangar 7 del antiguo aeropuerto de Tempelhof, una imponente estructura construida por Hitler para mostrar el poder nazi y que ahora se utiliza para alojar a los refugiados.
"Nos preocupa cómo nos verá el público alemán después de este ataque terrorista", agrega Sufi, mientras introduce sus manos en su chaqueta roja para mantenerse caliente durante una mañana helada. "Mi mensaje a los alemanes es: 'No sospeches de todo el mundo, no generalicéis'".
Este martes, el grupo de refugiados fue además abordado por decenas de periodistas ansiosos de información sobre la operación policial de este lunes por la noche. A la hora de salir del centro, los inmigrantes miraban al suelo e intentaban zafarse de los reporteros, mientras se apresuraban a tomar clases de idiomas.
El centro de Tempelhof, registrado
"Nos despertaros a gritos en alemán alrededor de las 3:30 de la mañana", indica el refugiado afgano Safihullah, de 21 años, que vive en el hangar 6. "No teníamos ni idea de lo que estaba pasando, los guardias de seguridad nos dijeron que nos quedáramos en el interior del centro. Luego nos dijeron que había habido una incursión policial, pero no dijeron nada más", añade Safihullah.
Al parecer, el detenido como supuesto conductor del camión que arrolló a la multitud se había hospedado en el centro de refugiados de Tempelhof. Sin embargo, la policía dijo posteriormente que no estaban seguros de si él era el atacante, y era posible que el perpetrador real hubiera huído.
"No tenemos nada que ver con este crimen", comenta Ammar Wazzaz, un refugiado de 45 años de la ciudad siria de Idlib. "Espero que lo que hizo esta persona no empañe la reputación de los refugiados como nosotros que estamos muy agradecidos a Alemania".
Yaser, un refugiado de Siria de 32 años, afirma que se quedó muy deprimido al enterarse del ataque a través de la red social Facebook. "Huimos de este tipo de terrorismo y nos está siguiendo aquí", dice, mientras se ajusta un gorro negro en la cabeza.
La afluencia de más de un millón de inmigrantes a Alemania durante los dos últimos años, principalmente musulmanes que huyen de países como Siria, Irak y Afganistán, ha endurecido la opinión pública sobre la inmigración y debilitado el apoyo a la canciller Angela Merkel.