Álvaro Nadal: "No es momento de salarios altos ni de incrementar el gasto público"
- El ministro de Energía no ve mejora "suficiente" para revertir las reformas
- Nadal ha destacado la ganancia de competitividad de la economía española
- Apuesta por las exportaciones y dos "revoluciones": la digital y la energética
El ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Alvaro Nadal, ha advertido este miércoles que "no es momento de salarios altos ni de incrementar el gasto público" si se quiere evitar que España cambie su evolución económica, según recoge la agencia Servimedia.
De acuerdo con Nadal -que ha apostado por la necesidad de invertir en capital humano y, especialmente, en tecnología- el país debe continuar con la política económica de los últimos años para que "más compañías exporten, se mantenga la contención de precios y salarios, mayor innovación y que la inversión púbica se oriente a nuevas actividades".
Por otra parte, el ministro ha valorado la ganancia de competitividad lograda por la economía española durante los últimos cuatro años, en los que ha logrado encadenar inflaciones más bajas que las de Alemania. "Era algo impensable", ha sentenciado para destacar la creación de "una base sólida para la economía dejando atrás una crisis atroz".
En este momento, la situación económica, según Nadal, "permite pensar un poco más en el futuro y en invertir en dos grandes revoluciones, la digital y la energética".
"La clave son las exportaciones"
Así se ha expresado Nadal en el Spain Investors Day, donde ha querido transmitir el mensaje de que "el cambio político que se ha producido en España no es suficiente para revertir las reformas" económicas.
En esta línea, el responsable de la Oficina Económica de La Moncloa ha sostenido que "la clave son las exportaciones" y ha recordado que antes de las crisis se produjo siempre una caída de las ventas al exterior y que en los últimos años han pasado de representar el 25% del PIB al 33%.
Por este motivo, Nadal ha destacado la importancia de que la Unión Europea y Estados Unidos puedan cerrar el acuerdo comercial TTIP, ya que considera que al representar el 50% del comercio mundial servirá como estándar para todo el mundo.
En cuanto al Brexit, el ministro ha indicado que su negociación debe tener "dos líneas rojas", que se mantenga el principio de que "estar fuera no puede ser mejor que estar dentro" y que se preserven "lo mejor que podamos nuestras relaciones económicas".