Mueren cinco diplomáticos de Emiratos Árabes Unidos en un atentado en Afganistán
- El atentado se produjo este martes en la residencia del gobernador de Kandahar
- El embajador emiratí se encuentra entre los heridos
- Los talibanes aseguran que no tienen nada que ver
Cinco diplomáticos de Emiratos Árabes Unidos (EAU) murieron este martes en Afganistán en un atentado con bomba. Así lo ha confirmado el gobierno de los Emiratos a través de la agencia de noticias oficial, WAM [EN].
Los cinco fallecidos se dedicaban a proyectos humanitarios, educativos y de desarrollo, según WAM. El presidente de los emiratos, jeque Jalifa bin Zayed al Nahyan, ha ordenado luto nacional durante tres días.
En el ataque, ocurrido en la ciudad de Kandahar, murieron 11 personas y otras 12 resultaron heridas, entre ellas el embajador de EAU en Afganistán, Yuma Mohammed Abdullah al-Kaabi, y el gobernador de Kandahar, Homayoon Azizi.
Entre los fallecidos se encuentran un diplomático, un vicegobernador regional y dos parlamentarios afganos.
Ataque en la oficina del gobernador de Kandahar
El ataque con bomba se produjo en el complejo de oficinas del gobernador en el momento en el que este se entrevistaba con el embajador emiratí.
"Los explosivos se encontraban entre los canapés y estallaron durante la cena", ha explicado el jefe de la Policía local, según cita Afp. "Algunas víctimas, totalmente quemadas, no han podido ser identificadas aún", ha añadido.
El embajador de los EAU se encontraba de visita oficial en Kandahar para reunirse con altos cargos regionales e inaugurar las obras de una guardería que se construirá en la capital homónima con un presupuesto de dos millones de dólares.
El ataque se produjo después del doble atentado suicida en las inmediaciones del Parlamento afgano en Kabul, una acción reivindicada por los talibanes que causó al menos 30 muertos y 80 heridos.
Los talibanes, sin embargo, se han desvinculado del atentado de Kandahar. Uno de sus portavoces, Qari Yusuf Ahmadi, ha afirmado en un comunicado remitido a Efe que el ataque se debió "a disputas internas del enemigo" y "no tiene nada que ver" con ellos.
El grupo insurgente ha ganado terreno desde el fin de la misión de combate de la OTAN en enero de 2015 y controlan ya, según datos de Estados Unidos, un tercio del territorio afgano.