La Audiencia Nacional propone juzgar al expresidente de Abengoa y a su número dos por las indemnizaciones

• También incluye al expresidnete, Antonio Fornieles, y a otros dos consejeros
• Abengoa pagó a Sánchez y Benjumea antes de declarar concurso de acreedores

El expresidente de Abengoa, Felipe Benjumea, en una imagen de archivo.

La juez de la Audiencia Nacional, Carmen Lamela, ha procedido este viernes contra los expresidentes de Abengoa, Antonio Fornieles y Felipe Benjumea, y al que fuera exconsejero delegado con este último, Manuel Sánchez Ortega, a los que atribuye un delito de administración desleal por las millonarias indemnizaciones que recibieron Benjumea y Sánchez Ortega poco antes de que la compañía presentara el preconcurso de acreedores.

En un auto, la magistrada transforma las diligencias previas en procedimiento abreviado y acusa a todos los que estuvieron presentes en la reunión de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones donde se acordaron los pagos. Además de Fornieles, que entonces era consejero, Benjumea y Sánchez Ortega; la causa incluye a las exconsejeras Mercedes Gracia y Alicia Velarde.

Según defiende la Fiscalía, Abengoa amplió su capital para afrontar sus deudas y el Consejo de Administración decidió el 23 de septiembre de 2015 "aparentar la marcha" de Benjumea de la sociedad, quedándose bajo la denominación de "asesor" del Consejo y cobrando un sueldo "idéntico" al que venía recibiendo como consejero.

Decisiones no acordes a los resultados de la empresa

En concreto, la magistrada analiza las cláusulas de los contratos que firmaron por las que se les concedían unas indemnizaciones por cese anticipado de 4.484.000 euros, en el caso de Sánchez Ortega y de 11.484.000 para Benjumea; unos derechos reconocidos en esas cláusulas que la juez entiende que "no estaban contemplados en contratos anteriores y tampoco era preceptivo que se incluyeran en los nuevos contratos mercantiles”.

Eun un comunicado emitido este viernes por la AN, la juez hace constar que las indemnizaciones de los dos ex altos cargos se produjeron en un momento en el que la empresa ya atravesaba problemas económicos por lo que las compensaciones económicas, según la magistrada, “no parecen acordes con los resultados empresariales de la sociedad”.

Benjumea recibió el pago pese a ser consciente de la "mala situación" la sociedad, que en noviembre de 2015 pidió el preconcurso de acreedores. Los mismos miembros del Consejo de Administración acordaron el 15 de junio de 2015 las condiciones económicas y el cese de Sánchez Ortega.

Ambos siguieron vinculados a Abengoa

Por otra parte, la magistrada considera que ni Sánchez Ortega ni Benjumea se desvincularon de Abengoa y para ello hace constar que "Sánchez Ortega renunció a sus cargos en mayo y un mes después firmó un contrato de prestación de servicios por el que seguiría cobrando la remuneración que le correspondería como consejero delegado".

En el caso de Benjumea, recuerda el auto, fue en la misma reunión en que se le cesa como presidente cuando se le nombró consejero dominical.

La juez se basa en este vínculo de ambos con la entidad para concluir que no les correspondía la suma que se les otorgó en concepto de “confidencialidad postcontractual” puesto que la relación contractual con Abengoa “no se había extinguido”.

Finalmente, la magistrada ha descartado imputar a Sánchez Ortega el delito de información privilegiada del que le acusaban los querellantes, aunque sí ha puesto en duda las razones personales y de salud que esgrimió en abril para dejar Abengoa. Sánchez Ortega pasó, en julio de 2015, a prestar sus servicios en Black Rock, empresa de gestión de inversiones estadounidense de Nueva York. El cambio “suponía un esfuerzo añadido que no parece acorde con su intención de emplear menos energías en su actividad profesional”, según la magistrada.