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El arte de Ribera se mezcla con el suspense del cómic 'Yo, asesino'

  • El museo del Prado edita su segundo cómic, El perdón y la furia, de Altarriba y Keko
  • El libro coincide con la exposición Ribera Maestro del dibujo, que puede verse hasta el 19 de febrero

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El Museo del Prado lanza el cómic 'El perdón y la furia', sobre Ribera

Tras el éxito de El Tríptico de los encantados, de Max (por el quinto centenario de El Bosco), el Museo del Prado lanza su segundo cómic: El perdón y la furia, centrado en José de Ribera (1591-1652), coincidiendo con la exposición Ribera Maestro del dibujo, que puede verse hasta el 19 de febrero.

Sus autores son el guionista Antonio Altarriba (El arte de volar, El ala rota) y el dibujante Keko (La protectora), que han urdido una trama de suspense sobre Las Furias, una de las obras más famosas del pintor, mezclándolo con el universo que crearon para su premiada novela gráfica Yo, asesino (Norma Editorial), con la que consiguieron, entre otros galardones, el Gran Premio 2015 de la Asociación de Críticos y periodistas de Cómics de Francia y el de Mejor álbum extranjero publicado en Portugal.

“El Museo del Prado –asegura Altarriba- y más concretamente José Manuel Matilla, que es el director del departamento de dibujos y estampas, leyeron Yo, asesino, un cómic donde el arte tiene mucha importancia, y que estaba protagonizado por un profesor de historia del arte que además investigaba sobre la representación del sufrimiento en la pintura europea. Y de ahí salió la idea de este cómic. Porque en el Museo del Prado hay muchísimos cuadros donde se representen suplicios martirios, torturas… Y el pintor más famoso de esta temática es José Ribera, que pintado casi todos los mártires del santoral. Además nos dieron absoluta libertad para hacer lo que quisiéramos, siempre que Ribera fuera uno de los temas centrales del cómic”.

“Pensamos que habían leído Yo, asesino y querían algo en esta línea -añade Keko-, porque no nos hubieran llamado para hacer una comedia romántica. Teníamos el tiempo muy justo para que el cómic coincidiera con la exposición de Ribera, y una de las cosas que nos ha facilitado el trabajo es utilizar el universo de Yo, asesino. Incluso recuperamos algunos personajes que eran secundarios en aquella obra y que aquí son protagonistas absolutos”.

Portada y página de 'El perdón y la furia'
Portada y página de 'El perdón y la furia'

Portada y página de 'El perdón y la furia'

El misterio de Las Furias

En 1632 José de Ribera (el Españoleto), recibió el encargo de pintar las Furias, un conjunto de cuatro cuadros que representa a los grandes supliciados de la mitología clásica (Tenéis más información al final de este artículo). De ellos, el Prado conserva los cuadros de Ticio e Ixión, pero el paradero de Sísifo y Tántalo es un misterio. Nadie sabe cuándo desaparecieron, cómo ni por qué. Ese es el punto de partida del cómic.

El perdón y la furia –asegura Altarriba-, está ambientado en la época actual y el protagonista vuelve a ser un profesor universitario que está obsesionado con el mundo de Ribera y en concreto por la misteriosa desaparición de dos de las Furias, lo que nos sirve nos sirve de desencadenante de la intriga”.

Viñetas de 'El perdón y la furia'
Viñetas de 'El perdón y la furia'

Viñetas de 'El perdón y la furia'

Según Altarriba: “Una de las cosas que se decía de Ribera, el mismo Lord Byron lo aseguró poéticamente, es que representaba tan bien a los santos y a los supliciados porque empapaba sus pinceles con sangre de santo. Pero esto tiene visos de tener algo de realidad, porque es el momento en el que, en Nápoles, se licua la sangre de San Genaro…”

“Y entonces –continúa el guionista- es cuando nuestro profesor empieza a investigar dónde pueden estar esos cuadros. También comentamos en el cómic la búsqueda de las técnicas de Ribera, de sus rivalidades con otros pintores del momento, con los virreyes con los que le tocó bregar en Nápoles… Y esto nos permite construir una intriga con asesinatos, rivalidades entre universitarios… un poco siguiendo la línea de Yo, asesino.

Viñetas de 'El perdón y la furia'
Viñetas de 'El perdón y la furia'

Viñetas de 'El perdón y la furia'

Arte y cómic

El perdón y la furia sigue el estilo de Yo, asesino. “Volvemos a jugar con el blanco y negro y el color rojo –asegura Altarriba-. Con el añadido de que los cuadros de Ribera aparecen en color integrados en las viñetas en blanco y negro; creando un juego que cromáticamente y estilísticamente es muy impactante”.

“Incrustar esos cuadros a color en mis dibujos en blanco y negro ha sido muy complicado -confiesa Keko-. Técnicamente es fácil, se trata de recortarlos y pegarlos. Pero integrarlos para que no queden como un pegote ya es otra cuestión”.

“Cuando se trata de adaptar a un gran maestro de la pintura o la literatura –continúa el dibujante-, como hice cuando adapté a Henry James (La protectora), siempre digo que lo importante es planteárselo con humildad pero también con poca vergüenza. Hay que tirarse a la piscina. Y en esto me he sentido muy acompañado por la figura de Ribera, porque encuentro en él cosas muy familiares. En el Ribera más heavy, el más tenebrista, más Caravaggio y más salvaje, ahí es donde yo me he sentido más cómodo como dibujante”.

Me he divertido mucho haciendo versiones de sus dibujos y cuadros, y sintiendo que no le estaba faltando al respeto. Como si sintiera la voz de él que me dijera no te cortes”-añade el dibujante-.

Fragmento de una página de 'El perdón y la furia'

Fragmento de una página de 'El perdón y la furia'

Representando el dolor

“En esta época de la pintura barroca la anatomía era lo principal –asegura Keko-, y en Ribera la anatomía, el detalle que tienen sus cuadros… son impresionantes. En la cara sufriente y ensangrentada de Tizio estás viendo todas las arrugas, los dientes… todo para conseguir la máxima expresión del dolor. En ese sentido para mí Ribera es un pintor poco académico, poco clásico, le gusta alargar mucho los brazos… todo buscando siempre la máxima expresión del dolor y de la violencia que sufren esos cuerpos”.

“Para mí –continúa Keko- ese es el rasgo principal de su pintura; aparte de su dominio de la luz, ya que es uno de los grandes maestros de la escuela tenebrista y el principal seguidor de Caravaggio. Estas cosas son las que más me han inspirado en algunas de estas viñetas en las que tenía que reflejar a Ribera”.

“El dolor y el sufrimiento –añade Altarriba- en este caso también es una excusa para los estudios anatómicos, los escorzos, las perspectivas… y para demostrarnos que era un gran virtuoso como pintor. Este criterio estético riberiano organiza gráficamente la historia.

“Nosotros –continúa Altarriba- nos hemos centrado en las Furias, pero salen también otros muchos cuadros porque la apuesta estética, más que narrativa, es que el mundo riberiano impregne la historia. Por eso al protagonista y los actores contemporáneos que van en busca de Ribera, podemos verlos en viñetas, posiciones… que recuerdan mucho (tanto por la posición, la iluminación o la composición), a los cuadros del pintor. El arte de Ribera ha condicionado toda la composición del libro e incluso la organización de las viñetas”.

Viñetas de 'El perdón y la furia'
Viñetas de 'El perdón y la furia'

Viñetas de 'El perdón y la furia'

Sus proyectos

Tras este proyecto Altarriba y Keko seguirán con: “Lo que llamamos nuestra Trilogía del Yo, o Trilogía egoísta –asegura Altarriba-. Tras Yo, asesino, seguiremos con Yo, loco y Yo, mentiroso.

Yo, loco –continúa Altarriba- va a ser una reflexión, muy negra y en clave de thriller, sobre el papel de las industrias farmacéuticas, centrado en el tratamiento de las enfermedades mentales. Y el tema de Yo, mentiroso es la manipulación informativa en los tiempos actuales, tanto por los propios medios como por parte de los partidos políticos. Cómo se manipulan las noticias…

Antonio Altarriba y Keko en la presentación de 'El perdón y la furia'

Antonio Altarriba y Keko en la presentación de 'El perdón y la furia'

Las Furias

Las Furias son cuatro moradores del Hades greco-latino, al que habían sido condenados por haber desafiado a los dioses: Ticio, cuyo hígado devoraba un buitre por intentar violar a una amante de Zeus; Tántalo, castigado a procurarse en vano alimento por servir a su hijo de festín a los dioses; Sísifo, condenado a portar una enorme piedra por haber delatado las infidelidades de Zeus; e Ixión, castigado a dar vueltas sin fin en una rueda por querer seducir a Hera.

Página de 'El perdón y la furia'
Página de 'El perdón y la furia'

Página de 'El perdón y la furia'