Asciende a 16 el número de muertos en el hotel italiano sepultado por un alud
- Hay todavía trece personas desaparecidas bajo la nieve y los escombros
- Un alud sepultó el hotel Rigopiano tras los terremotos del pasado miércoles
Los cuerpos de otras siete personas han sido recuperados este martes bajo el hotel Rigopiano, de la localidad de Farindola, en la región de Los Abruzos (centro de Italia) sepultado por un alud el pasado miércoles, por lo que hasta el momento asciende a 16 el número de muertos y hay 13 personas desaparecidas, además de once heridos.
Así lo ha confirmado una fuente de Protección Civil a Efe, que ha explicado que las labores de búsqueda continúan sin descanso con la participación de unos 150 efectivos, entre militares, bomberos, policías y trabajadores de Cruz Roja y del Servicio Alpino, que se alternan en turnos.
La esperanza de los equipos de rescate es llegar al centro del hotel, donde se encontraba la zona del bar y donde se cree que podrían haberse concentrado algunos de los huéspedes que están aún desaparecidos. "No pararemos hasta que no tengamos la certeza de que no queda nadie entre los escombros, nadie", ha dicho a varios medios el miembro de Protección Civil, Luigi D'Angelo.
"Se está excavando en el corazón de la estructura, en la zona entre la cocina, el bar y el recibidor. Hasta que no hayamos encontrado a todos, no pararemos", ha añadido.
Sin supervivientes desde el viernes
Sin embargo, después de que el viernes fuesen localizadas nueve personas vivas, entre ellas los cuatro niños que estaban desaparecidos, no ha vuelto a haber señales de vida bajo las cientos de miles de toneladas de nieve y rocas que sepultaron este hotel de lujo situado en las laderas del macizo del Gran Sasso a 1.200 metros de altura.
De hecho, en las últimas horas se han recuperado nueve cadáveres, mientras que se estima que 13 personas aún se encuentran desaparecidas bajo los cascotes.
La avalancha fue provocada por una serie de terremotos el pasado miércoles, y desde la madrugada del jueves, los equipos de rescate excavan en busca de supervivientes.
Según una primera reconstrucción, 120.000 toneladas de nieve, rocas y otros detritos golpearon con una velocidad de 100 kilómetros por hora el hotel. Así, señalan los expertos, las habitaciones que se encontraban en los pisos altos del hotel han sido completamente arrasadas por la avalancha de nieve.
Solo un herido continúa hospitalizado
Entre los nueve supervivientes, solo una persona tendrá que permanecer hospitalizada al haber sido operado de un brazo que quedó atrapado en una de las vigas. El lunes, fueron dados de alta tres de los cuatro niños rescatados, entre ellos Gianfilippo y Ludovica Parete, de seis y ocho años, hijos de Giampiero, que fue quien advirtió de lo sucedido, y de Adriana Vranceanu, rescatada por los equipos de bomberos tras más de 50 horas sepultada.
También abandonó el hospital Edoardo, de ocho años, que no sabe aún que sus padres, Sebastiano y Nadia Di Carlo, han sido encontrados muertos. Mientras que Samuel, de siete años, permanecerá en el hospital mientras se esperan noticias de sus padres, que están desaparecidos.
Ante las críticas hacia las autoridades por la supuesta lenta respuesta ante la tragedia, después de que una responsable de la prefectura tomara por una broma la primera llamada pidiendo auxilio, los bomberos han defendido la actuación y los medios que están participando en el rescate.
Según han subrayado, el contingente desplegado en la zona del hotel Rigopiano es "absolutamente adecuado" teniendo en cuenta la complejidad de la intervención. Una mayor presencia, han precisado, "no solo no ayudaría a acelerar la búsqueda, sino que podría ser perjudicial" dada las características del lugar, donde el terreno sigue inestable.