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Un estudio constata la "desventaja racial" en salud de los negros en Estados Unidos

  • Son más propensos a sufrir la muerte de un ser querido en etapas tempranas
  • Este hecho tiene un impacto negativo en todos los aspectos de su vida
  • Las principales razones son la pobreza y un sistema sanitario deficiente

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Los resultados del estudio revelan un aspecto de la desigualdad racial poco tenido en cuenta.
Los resultados del estudio revelan un aspecto de la desigualdad racial poco tenido en cuenta.

Los negros de Estados Unidos sufren más pérdidas de seres queridos que los blancos y lo hacen más pronto en su vida, lo que supone una fuente más de "desventaja racial", según un nuevo estudio publicado por la revista PNAS. La investigación, que incluyó datos de más de 40.000 personas, ha analizado la relación entre la desigualdad racial y la muerte a partir de la información recogida en varios estudios y bases de datos nacionales.

La conclusión es que los negros estadounidenses tienen "significativamente" más probabilidades que los blancos de sufrir la muerte de una madre, un padre o un hermano entre la infancia y la mediana edad.  También es más probable que un negro sufra la pérdida de su pareja o de un hijo entre el principio de la edad adulta y la vejez.

"Estos resultados revelan un aspecto de la desigualdad racial poco tenido en cuenta. Uno que podría contribuir a la transmisión de desventajas de salud de una generación a otra", indica el estudio. Esas "desventajas" son las consecuencias del duelo por la muerte de un ser querido y del impacto que eso tiene en todos los aspectos de la vida. "Este estudio documenta un proceso de generación en generación con efectos corrosivos en las familias y comunidades negras", señala el estudio.

Índices más altos de mortalidad

Las causas de que los afroamericanos tengan índices más altos de mortalidad radican en una larga historia de desigualdades raciales que incluye la pobreza o la falta de acceso a una sanidad de calidad.

En este trabajo participaron investigadores de la Universidad de Texas en Austin y de la Universidad de Michigan.