Rajoy se muestra "en contra de los vetos y las fronteras" pero evita una condena explícita a Trump

• Para el presidente del Gobierno, "el mundo no va a caminar en esa dirección"
• Dastis aboga por unas relaciones "excelentes" y "decirse las cosas claras"
• El Gobierno defenderá sus principios ante EE.UU. pero "no pegando muchos gritos"

Rajoy, sobre el veto migratorio de Trump: "No estoy a favor de los vetos ni de las fronteras"

Tres días después de que el presidente de EE.UU., Donald Trump, ordenara cerrar temporalmente las puertas a todos los refugiados en inmigrantes de siete países musulmanes, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se ha mostrado en contra de los "vetos y las fronteras", en relación con esta política de veto migratorio que ha causado un manifiesto rechazo dentro y fuera de los Estados Unidos, pero no ha hecho una condena explícita de esta decisión. Previamente, dos de sus ministros han subrayado que la actitud del Ejecutivo español será defender sus principios ante el norteamericano, pero "no pegando muchos gritos".

Los principales partidos políticos españoles se mostraron frontalmente en desacuerdo con esta medida, una de las primeras de la administración Trump en la Casa Blanca, y también reclamaron más "contundencia" por parte del Ejecutivo de Mariano Rajoy y no caer en lo que podría ser un "silencio cómplice".

En declaraciones a la prensa tras el acto en el que Rajoy ha concedido a título póstumo la Llave de Oro del Municipalismo a Rita Barberá, que fue presidenta de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), el presidente del Gobierno no ha ido más allá en sus comentarios que añadir que, en su opinión, "el mundo no va a caminar en esa dirección", en referencia al repliegue fronterizo y limitación de la libertad de movimientos.

"Espero que en el futuro esto se arregle y nos instalemos en una situación de normalidad", ha concluido.

Dastis: "Entre amigos hay que decirse las cosas claras"

En un tono diplomático parecido se ha expresado el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Alfonso Dastis, quien ha abogado por tener unas relaciones "excelentes" con el gobierno estadounidense, aunque ha subrayado que "entre amigos" hay que decirse "las cosas claras". "Y es lo que vamos a hacer", ha enfatizado.

El ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis. EFE

Así se ha pronunciado este martes al término de un desayuno informativo con el portavoz del Gobierno y ministro de Educación, Cultura y Deporte, Iñigo Méndez de Vigo, al ser preguntado cómo valora el Ejecutivo español las medidas que está tomando Trump, entre ellas el veto migratorio.

Dastis ha subrayado que "las relaciones con Estados Unidos deben de ser excelentes". "Pero como él ha dicho, entre amigos hay que decirse las cosas claras y es lo que vamos a hacer", ha manifestado.

Decir las cosas "sin estridencias"

Previamente, el portavoz del Gobierno ha afirmado que el Ejecutivo de Mariano Rajoy defenderá sus principios ante Donald Trump, pero que lo hará "sin estridencias" y "no pegando muchos gritos".

Íñigo Méndez de Vigo ha indicado que para España es "muy importante llevarse bien con sus socios y aliados" y ha recordado que "no siempre ha sido así" con Estados Unidos, en alusión implícita al encontronazo que protagonizó el Ejecutivo socialista de José Luis Rodríguez Zapatero en el desfile del 12 de octubre al no levartarse al paso de la bandera americana. Según ha añadido, se ha revertido esa situación y quieren que continúe así.

Por eso, ha señalado que el Gobierno del PP ha hecho un llamamiento para que se recompongan las relaciones entre Estados Unidos y México.

"Creo que tenemos que mantener y defender nuestros valores y la mejor manera de comportarse con un socio es decir las cosas con claridad y franqueza. Y eso es lo que vamos a hacer, bilateralmente y en el marco de la Unión Europa", ha precisado.

Méndez de Vigo ha criticado que haya "otros" que lo que quieren es "hacer mucho ruido" mientras que el Gobierno del PP prefiere un trabajo "continuado y eficaz", y ha negado que España haya sido "discreta" porque "desde el primer día" dejó "bien claro" cuál era su posición y abogó por restablecer un "clima de entendimiento"