Al menos once muertos en un ataque suicida contra el Ejército en el sur de Afganistán

• Se perpetró con un coche bomba contra un vehículo militar
• Los talibanes se han atribuido la autoría del atentado

Los oficiales de las fuerzas de seguridad afganas inspeccionan el lugar donde estalló un coche bomba contra un vehículo del Ejército en Lashkar Gah, en la provincia de Helmand.

Al menos once personas han muerto y otras 20 han resultado heridas este sábado en un ataque suicida perpetrado contra un vehículo militar en la provincia de Helmand, en el sur de Afganistán, según han informado a Efe diversas fuentes.

Un coche bomba explosionó sobre las 14.30 hora local (10.00 GMT) contra un vehículo del Ejército afgano en las inmediaciones de la sede del Banco de Kabul en Lashkargah, capital de Helmand, ha indicado el portavoz del gobernador provincial, Omer Zawak.

Un portavoz del Hospital Provincial de Helmand que pidió el anonimato situó en once el número de muertos en el atentado y en 20 el de heridos, sin ofrecer más detalles sobre su estado de salud ni la gravedad de sus afecciones.

Una docena de los heridos, entre ellos una mujer y un niño, fueron trasladados al hospital local de la ONG italiana Emergency, detalló la organización en su cuenta de Twitter.

Los talibanes se atribuyeron la autoría de la acción y confirmaron que se trató de un ataque suicida con vehículo bomba dirigido a un grupo de "enemigos" que se habían reunido para cobrar sus salario.

En un mensaje en Twitter, el portavoz talibán Qair Yousuf Ahmadi afirmó que 39 hombres armados, entre ellos varios oficiales, murieron y resultados heridos, si bien la formación insurgente tiende a ofrecer información sesgada sobre el alcance de sus acciones.

El año 2016, el más cruento

El pasado martes, 21 personas resultaron muertas y más de 40 heridas en un atentado perpetrado en el aparcamiento del Tribunal Supremo en Kabul, del que se responsabilizó el grupo yihadista Estado Islámico (EI).

Esta semana la misión de la ONU en Afganistán (UNAMA) informó de que el año 2016 fue el más cruento para la población civil en Afganistán desde que empezó a contar las víctimas en 2009, al contabilizar 3.498 muertos y 7.920 heridos.

En medio del recrudecimiento del conflicto ocurrido desde el fin de la misión de combate de la OTAN en enero de 2015, también las bajas entre las fuerzas de seguridad aumentaron el pasado año hasta alcanzar los casi 7.000 muertos hasta noviembre, según datos del Congreso de EEUU.

De acuerdo con el órgano estadounidense, el Gobierno afgano continua perdiendo terreno ante los talibanes y controla ya apenas un 57% del país. En este contexto, los insurgentes cercaron el pasado año hasta cinco capitales de provincia en Afganistán, entre ellas Lashkargah.