Segundo registro en la sede del Frente Nacional en París por supuesta desviación de fondos europeos con empleos ficticios
- La policía se habría incautado de discos duros de varios asistentes parlamentarios
- El partido de Marine le Pen afirma que es "una operación mediática" contra ella
- Le Pen lidera las encuestas de las presidenciales a dos meses de los comicios
Agentes de la Policía de Francia para recabar datos sobre la supuesta desviación de fondos europeos mediante empleos ficticios de sus eurodiputados, entre ellos la líder del partido, Marine le Pen.
El propio Frente Nacional ha confirmado el registro a través de un comunicado, en el que denuncia que la actuación de las autoridades "se trata claramente de una operación mediática destinada únicamente a intentar perturbar el buen desarrollo de la campaña electoral presidencial y de atacar a Marine Le Pen en el momento en el que sube en las intenciones de voto, sobre todo en las de la segunda vuelta".
La sede del Frente Nacional, ubicada en Nanterre, una localidad de la periferia parisina, ya fue registrada en febrero del año pasado en el marco de la investigación del presunto desvío de los fondos que el Parlamento Europeo ofrece a los eurodiputados para contratar asistentes: los investigadores sospechan que algunos de esos asistentes parlamentarios, pagados por la institución europea, trabajaban en realidad para el partido.
Según el canal de televisión BFMTV, los investigadores han confiscado los discos duros de los ordenadores de varios asistentes parlamentarios, y en las próximas horas procederán con los interrogatorios.
Dos años de pesquisas
El Frente Nacional subraya en su comunicado que el registro de este lunes versa sobre "los mismos hechos supuestos", lo que a su juicio "confirma que la primera investigación fue infructuosa".
La Justicia francesa abrió una investigación preliminar sobre este asunto en marzo de 2015 a petición del Parlamento Europeo por los presuntos empleos ficticios de varios asistentes parlamentarios del Frente Nacional en la Eurocámara.
El caso concierne en particular a dos de los asistentes parlamentarios contratados como tales por Le Pen, favorita según los sondeos para ganar la primera vuelta de las presidenciales francesas del próximo 23 de abril, hasta el punto de que el Parlamento Europeo le ha reducido el sueldo como eurodiputada por presunta malversación de fondos.
Así, según la Oficina Antifraude del Parlamento Europeo, la secretaria personal de Le Pen, Catherine Griset, pagada por la Eurocámara, trabajaba en realidad para el partido. El otro caso investigado que atañe a la líder ultraderechista es el de su guardaespaldas Thierry Légier, que en 2011 recibió 41.500 euros como "asistente local" de la eurodiputada.