García Madrid, detalles que no se ven pero se sienten
- El sastre limpia las prendas en busca de la pureza de la costura
- El azul es el color estrella de la colección
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“He querido jugar con lo que ya existe y dar una nueva visión de las prendas, actualizando lo clásico para hacerlo más urbano y joven pero a la vez ampliando el rango de edades que pueden llevar esta colección”.
Así define Manuel García, director creativo de García Madrid, su propuesta para el otoño e invierno de 2017/18 presentada en el OFF de MBFWM en el que ha hecho un gran trabajo de eliminar ornamentos y detalles superfluos para centrarse en la prenda.
“Hay demasiado circo, mucho circo", suelta.
"Ahora todo vale, todo, se ponen logos enormes y se hacen camisetas reivindicativas. Es un sofrito pensado solo en ser fotografiado pero no hay una idea de moda detrás, y yo he querido limpiar cada pieza para que se vea su esencia”.
Se aprecia el enorme estudio previo con el patronaje y la sastrería, sobre todo en las pinzas que se cololcan en las costuras."Son detalles que no se ven pero se sienten", dice.
El lujo es interior, no se exhibe. “El logo es arribista, su valor añadido lo necesita la gente que quiere demostrar algo, la persona que sabe qué tipo de prenda lleva no necesita logo”.
El color azul, su favorito, tiñe la colección en la que hay tonos crema, blanco y mucho gris, “al que he dado vida mezclándolo con otros colores”.
No faltan sus jerséis de cuello cuadrado, sus solicitadas camisas blancas y otras con pequeños estampados conceptuales o figurativos. Muy discretas.
Los pantalones son amplios, con el bajo tocando el zapato, con pinzas y volumen en el cuerpo, más clásicos y cómodos. Destacan las mezclas de texturas: lino con lana, seda con cashmere, cashmere con lana, algodones con mucha textura…”Son prendas de aspecto pesado, por el tejido y el color, pero son muy ligeras, no pesan nada”.
Las prendas de abrigo son irresistibles, con un corte impecable: chaquetones marineros reinterpretados, chaquetas de textura guateada ( como el chaleco husky que arrasó entre los pijos de los 90) que se vuelven elegantes con patrón de sastrería, abrigos con manga rangán y cinturón batín, lisos, con cuadros discretos.
El calzado es otro detalle de su lujo fácil de llevar. “Son zapatillas de deporte hechas con piel de primera calidad, la que se utiliza para los zapatos de vestir, he hecho tres modelos, dos muy sobrios y otro más atrevido”.
Los trajes llevan dos o tres botones, “el de dos botones estiliza más y la imagen es más limpia, el de tres botones es más deportivo”. Son muchos los chicos y los hombres que desean uno de sus trajes y arrasó vistiendo a muchos actores y directores de cine en la gala de los Goya.
“Empezamos haciendo cinco trajes y ahora tenemos en tienda unos ochenta”, dice orgulloso. Es para estarlo.