Macri se muestra pesimista sobre Venezuela: "Para ser sincero, no sé cuál es la salida"

• El presidente argentino repasa en Madrid la situación global con Vargas Llosa
• Macri ha apostado por impulsar la globalización y esquivar los populismos
• "El desorden mundial es una gran oportunidad para los países que se quedaron atrás"

El presidente argentino, Mauricio Macri, durante su diálogo con el escritor Mario Vargas Llosa en Madrid.

Sus primeros meses en el Gobierno, la vena proteccionista de Donald Trump en Estados Unidos, el populismo, la corrupción o la tecnología: el presidente de Argentina, ha aprovechado su visita a España para repasar, junto al escritor Mario Vargas Llosa, la situación de su país y del resto del mundo, en un diálogo en el que ha dejado traslucir su pesimismo por el enquistamiento de la crisis política en Venezuela.

“Honestamente, hoy no se ve ningún tipo de mecanismo que ayude a un país que está quebrado internamente“

"Te tengo que ser sincero, hoy no sé cuál es la salida", ha confesado Macri durante la conversación, celebrada en Casa de América después de su reunión con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy. "Honestamente, hoy no se ve ningún tipo de mecanismo que ayude a un país que está quebrado internamente", ha admitido.

"Es una situación frustrante; siempre hay un escalón más hacia el infierno", ha reconocido Macri, que fue el principal impulsor de la suspensión de Venezuela en el seno de Mercosur, si bien ahora percibe que esa medida "lo único que hace es potenciar el aislamiento de Venezuela y redoblar las políticas coercitivas por parte de [el presidente venezolano, Nicolás] Maduro".

Mauricio Macri, primera visita oficial a España de un presidente argentino en ocho años

Contra los populismos

En este sentido, Macri, ha criticado que se mantenga la equidistancia entre el Ejecutivo de Maduro y la oposición venezolana: "La situación es de terrible impotencia, porque aún hay dirigentes mundiales que defienden eufemismos", ha comentado.

Con todo, el mandatario argentino ha justificado el ascenso del chavismo - "[Hugo] Chávez llegó tras años de gobiernos que, en esa opulencia, en vez de resolver problemas sociales, dieron lugar a problemas de corrupción y desigualdad"-, así como su persistencia: "El populismo con dinero es difícil [de combatir]: cuando tienen para repartir, no es fácil explicarle al ciudadano que se está consumiendo futuro".

A su juicio, los argentinos ya han aprendido los costes de las políticas populistas: "El peronismo está entendiendo, la nueva camada de dirigentes peronistas es totalmente distinta, es un cambio absoluto". De hecho, ha recalcado que el suyo es el primer Gobierno en más de un siglo con minoría en ambas cámaras parlamentarias: "Todas las reformas estructurales fueron con el apoyo del peronismo".

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Apostar por la globalización

“Este desorden mundial es una gran oportunidad para los países que se quedaron atrás“

Desde esa base, su apuesta es avanzar en la integración regional e internacional, promoviendo el desarrollo de Mercosur y los vínculos con la Alianza del Pacífico. "Este desorden mundial es una gran oportunidad para los países que se quedaron atrás", ha asegurado.

Y ha avisado contra las tentaciones proteccionistas, con políticas como las que pretende implantar Donald Trump: "Estados Unidos se cierra, pero tecnología la tiene en casa, los robots se producen allí; eso es lo que destruye el empleo tradicional".

Con todo, Macri ha reconocido que su postura parece a contrapié en estos tiempos: "Estamos en la siguiente ola, porque ya probamos eso de aislarnos, de querer vivir con lo nuestro, de tener fórmulas mágicas que no funcionaron. Estamos yendo a donde venía el mundo, y ahora se quiere ir, es paradójico", ha apostillado.