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Elecciones en Francia

El enroque de Fillon desata una oleada de críticas en Francia por sus ataques a los jueces

  • El presidente, François Hollande, sale a defender a la policía y los jueces
  • También el Ministerio de Justicia señala que actúan "con total independencia"
  • Macron, el principal rival de Fillon, diuce que ha perdido "su sentido de la realidad"
  • El ex ministro Bruno le Maire, de su equipo de campaña, ha decidido dimitir

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El candidato de Los Republicanos a la presidencia de Francia, François Fillon, visita una feria agrícola en París
El candidato de Los Republicanos a la presidencia de Francia, François Fillon, visita una feria agrícola en París después de anunciar que será imputado.

El enroque de François Fillon, que se niega a retirar su candidatura a la presidencia de Francia pese a haber confirmado él mismo este miércoles que será imputado por el caso de los supuestos empleos ficticios de su familia, ha suscitado una oleada de críticas contra él por sus ataques a los jueces, surgidas desde el Gobierno y desde sus rivales políticos, e incluso ha provocado ya bajas sensibles en su partido.

Hasta el jefe del Estado, el presidente François Hollande, ha creído necesario defender el funcionamiento de las instituciones antes las invectivas de Fillon, que no solo ha denunciado un "asesinato político", sino que ha llegado a asegurar que "la democracia está en peligro", mientras insinuaba que los jueces encargados de investigar su caso no han tenido tiempo de estudiar el expediente y actúan con una opinión preconcebida.

Una candidatura a las presidenciales no autoriza a suscitar sospechas sobre el trabajo de policías y jueces

"Una candidatura a las presidenciales no autoriza a suscitar sospechas sobre el trabajo de policías y jueces, a crear un clima de desconfianza incompatible con el espíritu de responsabilidad y, aún peor, a lanzar acusaciones extremadamente graves contra la Justicia y, a mayor escala, contra las instituciones", ha remarcado Hollande en un comunicado.

El presidente socialista, que ha decidido no optar a la reelección en los comicios presidenciales que se celebran esta primavera, señala en la nota que, "como garante de la independencia de la autoridad judicial, quiero pronunciarme en contra de cualquier cuestionamiento de los jueces".

Reprimenda del Gobierno

"El pueblo francés es soberano. Sabrá pronunciarse en las próximas elecciones presidenciales, pero recuerdo que la Justicia también actúa en su nombre y que nadie puede eludirla", concluye el jefe del estado francés.

Los jueces de instrucción dirigen sus investigaciones con total independencia

También el Gobierno se ha apresurado, tras la comparecencia de Fillon, a defender la actuación de los jueces, a través de un comunicado del Ministerio de Justicia: "La labor en curso de los magistrados no debe ser comentada. Los jueces de instrucción dirigen sus investigaciones con total independencia, de manera colegial, respetando el derecho a la defensa y de la presunción de inocencia".

Al igual que la de Hollande, la nota gubernamental no menciona a Fillon, si bien deja claro que "los magistrados no reciben ninguna instrucción individual, venga de quien venga", y recalca que las decisiones judiciales "siempre" pueden recurrirse por las vías legales, "como millares de franceses hacen cada año".

François Fillon pierde los nervios y su sentido de la realidad

El candidato conservador también ha recibido críticas de su principal rival para colarse en la segunda vuelta de las presidenciales, el socioliberal Emmanuel Macron, toda vez que se da por hecha la victoria en la primera vuelta de la ultraderechista Marine le Pen: "François Fillon pierde los nervios y su sentido de la realidad. Él no es víctima de un asesinato político y Francia no está en una situación de guerra civil", ha declarado Macron a los periodistas en París.

El candidato conservador a las elecciones presidenciales de Francia, François Fillon, ha anunciado que el juez de instrucción le ha convocado el próximo 15 de marzo "a fin de ser imputado" por el caso de los supuestos empleos ficticios, pero ha confirmado que no se retira de la carrera presidencial. ¿Sólo el sufragio universal decidirá quién es el próximo presidente de la República¿, ha dicho en una declaración sin preguntas.

Críticas de sus rivales

Además, el exministro, que se presenta como independiente al frente del movimiento ¡En marcha! aunque formó parte del Gobierno de Hollande, se ha mostrado en contra de decretar una "tregua judicial" durante la campaña, como se había sugerido desde diferentes sectores, ya que eso vulneraría la igualdad de todos los franceses ante la ley.

Sin embargo, el Frente Nacional de Marine Le Pen ha denunciado que se usa la justicia para favorecer a Macron: "El calendario está instrumentalizado por el candidato del hollandismo, Macron", ha comentado el número dos del partido, Florian Philippot.

La propia Le Pen afronta un proceso judicial por un caso semejante al de Fillon, pues supuestamente atribuyó empleos ficticios pagados por el Parlamento Europeo a su guardaespaldas y su secretaria personal, por lo que el Frente Nacional ha sido el único partido que no ha cargado contra Fillon tras su compaarecencia.

Así, el candidato presidencial del Partido Socialista, Benoît Hamon, ha condenado las afirmaciones de Fillon en declaraciones a Le Monde, al señalar que encierran "una impresionante violencia" hacia los magistrados y la Justicia. Asimismo, el candidato de la izquierda radical, Jean-Luc Mélenchon, ha afirmado sentir "pena" por la derecha francesa, que, a su juicio, merecería "un candidato presentable".

Primeras grietas entre Los Republicanos

Con todo, lo más inquietante para Fillon probablemente sea que empieza a erosionarse el respaldo de su propio partido, Los Republicanos. Este miércoles ha sufrido la primera defección relevante en su entorno, con la dimisión del exministro Bruno le Maire como responsable de asuntos internacionales de la campaña.

Creo en el respeto de la palabra dada, es indispensable para la credibilidad de la política

"Creo en el respeto de la palabra dada, es indispensable para la credibilidad de la política", ha argumentado en un comunicado Le Maire, que dice renunciar por "sus principios", después de que Fillon dijera en enero pasado, cuando se conoció el escándalo del Penelopegate, que en caso de ser imputado no se presentaría a las elecciones.

Además, la vicepresidenta de Los Republicanos en la Asamblea Nacional, Catherine Vautrin, ha reclamado directamente que el partido presente "otro candidato" en los comicios presidenciales, un aspirante que pueda centrar su energía en la campaña electoral.

Incluso más grave aún es la decisión de la coalición de centro-derecha Unión de los Demócratas e Independientes, que cuenta con una treintena de diputados en la Asamblea Nacional, de "suspender" su participación en la campaña presidencial de Fillon, que pierde a uno de sus principales aliados. El presidente de la formación, Jean-Christophe Lagarde, ha indicado que el comité ejecutivo se reunirá la semana próxima para tomar una "decisión colectiva", pero por ahora se apartan del candidato conservador.