Trump suaviza el tono pero defiende su agenda nacionalista en un discurso conciliador en el Congreso

• El presidente de EE.UU. ha explicado su agenda para 2017 en el Congreso
• Ha pedido unidad para "arrancar de nuevo el motor de la economía de EE.UU."
• Ha insistido en acabar con el Obamacare, reducir impuestos y vencer a ISIS
• Los demócratas le han acusado de criminalizar al extranjero por veto migratorio

Trump modera su mensaje y pide colaboración a los demócratas para una reforma migratoria

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha suavizado el tono y las formas en su primer discurso ante la sesión conjunta del Congreso, en el que ha llamado a la unidad del país para "arrancar de nuevo el motor de la economía de EE.UU.", así como para aprobar los presupuestos con el mayor aumento en el gasto militar de su historia. También ha vuelto a incidir en sus promesas de acabar con la reforma sanitaria de Obama, bajar los impuestos, reducir la inmigración y derrotar al Estado Islámico.

El mandatario se ha alejado de su estilo abrupto y negativo, y ha adoptado una postura mucho más protocolaria en su primera aparición ante los miembros de ambas cámaras del Legislativo, ante los que se ha mostrado más abierto a encontrar lugares de encuentro con los republicanos, a los que criticó duramente en campaña, y también con los demócratas.

El escenario del discuro, la Cámara de Representantes, ha acogido a todos los miembros del Congreso (incluidos los senadores), así como a numerosos invitados por parte de los republicanos y los demócratas. Desde la viuda del ex juez del Tribunal Supremo Antonin Scalia hasta familiares de víctimas de inmigrantes ilegales.

Pide unidad a los demócratas

Durante su intervención, de más de una hora, Donald Trump ha descifrado cuál es su plan para este año 2017 y en qué áreas se va a centrar su política. El presidente ha comenzado condenando los recientes episodios de antisemitismo y violencia y acto seguido ha mandado el primer mensaje de unidad. "Estoy aquí para lanzar un mensaje de unidad y fuerza. Y lo hago desde el corazón", ha afirmado. También ha querido agradecer en su inicio a todos aquellos que comenzaron ese "terremoto" que le llevó a la Casa Blanca.

Trump pide unidad para "arrancar de nuevo el motor de la economía de EE.UU."

A continuación, ha intentado lanzar un mensaje de optimismo, patente durante toda su intervención, afirmando que este es el comienzo de un "nuevo tiempo de grandeza" para EE.UU y ha vuelto a recordar su ya mítica frase: "Los ciudadanos americanos están primero, para hacer América grande otra vez".

El primer tema de la noche ha sido el migratorio, insistiendo una y otra vez en que es necesario proteger las fronteras, frente a la llegada de "narcotraficantes y criminales". "Hemos defendido las fronteras de otros, mientras que las nuestras siguen abiertas de par en par", ha insistido Trump.

Asimismo, el dirigente estadounidense ha defendido su veto ante la llegada de lo que él califica "terrorismo radical islámico". "Mantendremos a nuestra nación a salvo de aquellos que nos quieren herir", ha comentado.

Construcción del muro y reforma económica

Misma postura contundente ha mostrado al insistir en la construcción del muro en la frontera sur de Estados Unidos con México, aunque no ha especificado como en otras ocasiones que vaya a ser el país que preside Enrique Peña Nieto el que vaya a sufragar los gastos de dicha construcción. Lo que sí ha pedido Trump ha sido colaboración a los demócratas para crear una nuevo sistema de inmigración, "basado en el mérito".

Imagen en la que se aprecia la división del Congreso entre los que aplauden (republicanos) y los que no (demócratas) REUTERS

En cuanto al capítulo del Estado Islámico, Trump ha vuelto a reafirmar que acabará con la organización terrorista, y que para ello trabajará con todos sus aliados, "incluso aquellos del mundo islámico". Para el magnate, las alianzas van cambiando y aquellos que en un momento fueron enemigos pueden convertirse más tarde en aliados. Precisamente, ha querido mandar también un mensaje hacia su más fiel aliado en Oriente Medio, Israel, con el que dice que mantendrán su "fuerte alianza".

Trump ha querido culpar de nuevo a Obama por sus políticas económicas que, según el republicano, han acabado con la economía de EE.UU. Por eso, promete "arrancar de nuevo el motor de la economía de EE.UU." gracias a medidas como la reducción de impuestos. Con esta gran disminución de las tasas, que irá fuertemente dirigida a las "clases medias", también pretende que las empresas estadounidenses puedan competir con las de todo el mundo y puedan crear más empleos. "Ahora será más difícil que las empresas abandonen nuestro país", ha afirmado, poniendo como ejemplo de éxito el del fabricante de motos, Harley-Davidson.

Inversión en infraestructuras y acabar con el Obamacare

La inversión ha tenido también cabida en el discurso de Trump, ya que ha pedido al Congreso un billón de dólares para renovar las infraestructuras del país. "Eisenhower construyó la red de autopistas del país. Ha llegado el momento de un nuevo plan de infraestructuras", ha comentado el presidente de EE.UU.

Sin duda otra de las promesas más repetidas a lo largo de la campaña fue la de acabar con la reforma sanitaria de Obama, el llamado 'Obamacare', por lo que no ha faltado en su discurso de este martes. Para Trump, el sistema sanitario "está colapsándose", por lo que "actuar no es una opción, es una necesidad". Ha insistido en crear una nueva reforma, aunque ha puntualizado que pretende que "aquellos que hasta ahora tenían cobertura sanitaria no la pierdan".

En el centro de la imagen Jamiel Shaw Sr, padre de Jamiel Jr., un joven que fue asesinado por un inmigrante ilegal AFP

Una de las invitadas de Trump era Megan Crowley, una mujer con una de las denominadas enfermedades raras. Precisamente este martes se celebraba el día de dichas enfermedades, para concienciar de la importancia de investigarlas. Sobre Megan, ha dicho admirar su enorme esfuerzo por seguir viviendo y luchar por seguir adelante cuando le dijeron que apenas le restaban cinco años de vida.

Defensa de las fuerzas armadas

La última parte del discuro de Trump se ha basado en el aspecto militar y de la seguridad. Ha comenzado alabando el papel de las fuerzas y cuerpos de seguridad y pidiendo que reciban más apoyo desde todos los colectivos. Además, ha anunciado que creará una comisión para defender a las víctimas de inmigrantes ilegales. Tras anunciar esto, ha presentado a cuatro invitados que se encontraban en el Congreso, que eran familiares de este tipo de víctimas.

En cuanto a la defensa del país, ha pedido al Congreso que apruebe los presupuestos que hace unos días presentó en el que los gastos en defensa aumentan considerablemente con respecto al año pasado. Tenemos que "dar a las fuerzas armadas las herramientas para, en caso de guerra, luchar y ganar", ha explicado Trump.

Tras esta petición, se ha vivido uno de los momentos más emotivos de la noche, ya que el presidente estadounidense ha presentado a Carry Owens, viuda del miembro de la Armada Ryan Owens. La esposa ha recibido un caluroso y largo aplauso por parte de todos los presentes en el Congreso.

En muchas de estas intervenciones en conflictos exteriores, Estados Unidos cuenta con sus aliados de la OTAN, organización que Trump apoya "fuertemente", pero reclama que "todos los miembros" cumplan con sus "obligaciones financieras". "Mi trabajo no es representar al mundo. Mi trabajo es representar a EE.UU.", ha insistido el magnate.

Para cerrar su primera intervención ante el Congreso, el presidente de EE.UU. se ha despedido un mensaje poético y ha afirmado que "a partir de ahora, Estados Unidos saldrá fortalecido por sus aspiraciones y no sobrepasado por sus temores"