La posible implicación de CDC centra la atención en el juicio del expolio del Palau de la Música
- Declaran los exresponsables de la entidad Jordi Montull y su hija Gemma
- Montull ultimaba un acuerdo para reducir sus penas a cambio de delatar a CDC
- Podría implicar a CDC en el cobro de comisiones por adjudicaciones de obras
- Su exdirector, Félix Millet, pretende desmarcarse de la gestión financiera
El juicio por el expolio del Palau de la Música que empezó el pasado 1 de marzo entra este miércoles en una fase decisiva, con el esperado interrogatorio a los exresponsables de la entidad Jordi Montull y su hija Gemma, quienes ultimaban un acuerdo con la Fiscalía para reducir sus penas a cambio de delatar a CDC.
Las negociaciones entre el ministerio público y los Montull para lograr una rebaja de la condena -que en el caso de Gemma la podría reducir de 26 a tres años de prisión, uno de ellos eludible con multa- planearon esta semana sobre las dos primeras sesiones del juicio, dedicadas al trámite de cuestiones previas.
A expensas de los eventuales acuerdos que puedan plantear otras defensas, el acercamiento de los Montull a la Fiscalía deja en una situación difícil a Fèlix Millet, dado que la probable delación de quien fue su mano derecha podría acabar incriminándole a él. Por eso, su defensa ha sondeado a su vez las posibilidades de un acuerdo para reducir la condena del expresidente del Palau de la Música.
La defensa de Millet calibra que el expresident del Palau pueda beneficiarse de una reducción de pena si amplía el alcance de la confesión que hizo en 2009 -cuando estalló el caso y asumió haber expoliado 3,3 millones de euros- en su declaración del próximo miércoles, en la que se plantea no desmentir a Jordi Montull. En todo caso, Fèlix Millet prevé desmarcarse ante el tribunal de la gestión financiera del Palau que dirigió durante tres décadas, según han informado fuentes jurídicas.
Presunta financiación ilegal de CDC
Todo esto se desvelará este miércoles. En primer lugar, declarará Gemma Montull, exdirectora financiera del Palau, que quiere acreditar que el reintegro de 3,2 millones de euros que efectuó entre marzo de 2004 y de 2007 fueron gastos particulares de Millet y no de los tres exresponsables, como señala la acusación.
Tras Gemma Montull, declarará su padre, quien ya anunció que ratificará lo que diga su hija, que, según su versión, "no tenía ni firma, no tocaba dinero alguno". "Había entrado en el Palau hacía tres años, cuando esto estaba en marcha y lo que quiso fue arreglarlo", afirmó.
Unas eventuales declaraciones de los Montull que implicaran a CDC como beneficiaria del desvío de fondos de esta entidad cultural proporcionarían a la Fiscalía suficiente material para dar por probado que el partido nacionalista se enriqueció con comisiones que la constructora Ferrovial le hacía llevar a través del Palau de la Música por adjudicaciones de obras públicas en los gobiernos de Jordi Pujol.
Para ello, en el interrogatorio a los dos acusados, cuyo alcance también forma parte de la negociación que mantiene su defensa con el fiscal, será clave que despejen la incógnita de si el "Daniel" que aparece en la documentación incautada en el Palau de la Música junto a datos sobre adjudicaciones y supuestas comisiones es Daniel Osàcar, extesorero de CDC, y por qué motivos su nombre figura en varias ocasiones en la agenda del que fuera mano derecha de Millet.
La Fiscalía cuenta también como prueba de cargo con unas anotaciones del Palau de la Música en las que, junto a la mención de los proyectos de adjudicación de la Ciutat de la Justicia y la línea 9 del metro, figuran los porcentajes 4% y 2,5%.
Mordidas que se repartirían CDC y el Palau
En base a todos esos indicios, el ministerio público deduce que la constructora Ferrovial habría pagado mordidas del 4% por las adjudicaciones de esas obras públicas, de las que CDC se quedó supuestamente con un 2,5% y otros 1,5% los exresponsables del Palau de la Música.
Para el ministerio público, la extinta formación convergente se embolsó 6,6 millones de euros en comisiones a través del Palau de la Música mediante los convenios de colaboración que la entidad cultural firmó con la fundación Trias Fargas (actual Catdem) afín a CDC, reconvertida ahora en PDeCAT. En total, el expolio del Palau de la Música está cifrado en más de 30 millones de euros.
Y tras las declaraciones de los exresponsables del Palau, está previsto que a partir del jueves sean interrogados ante el tribunal el resto de acusados por el expolio, entre ellos el propio Daniel Osàcar y los exdirectivos de Ferrovial Pedro Buenaventura y Juan Elizaga, cuyas explicaciones pueden quedar también condicionadas si los Montull 'tiran de la manta'.
Por este caso del Palau, la Fiscalía pide 27 años y medio para Fèlix Millet y Jordi Montull, siete y medio para Osàcar y cuatro y medio para los exdirectivos de Ferrovial. La defensa de estos empresarios planteó que los delitos que se les imputan habrían prescrito y confía en que se les exculpe en cuanto se resuelvan las cuestiones previas.