'La bella y la bestia', una versión destinada a convertirse en un clásico
- Emma Watson, Dan Stevens, Luke Evans y Kevin Kline protagonizan la película
- Bill Condon dirige esta adaptación del clásico de Disney que se estrena este viernes, 17 de marzo
La historia de La Bella y la Bestia, el inmortal cuento de hadas tradicional francés, cuyas versiones más conocidas son las de Gabrielle Bardot de Villeneuve (1740) y Jeanne-Marie Leprince de Beaumont (1756), se ha adaptado al cine en varias ocasiones; aunque las mejores siguen siendo las de Jean Cocteau (1946) y la de Disney (Gary Trousdale y Kirk Wise, 1991), que fue la primera película de animación nominada al Oscar a Mejor Película. A ellas hay que sumar ahora la revisión de Disney de su propio clásico animado; una excelente película, aunque no llegue al nivel de las mencionadas.
Y es que La Bella y la Bestia tiene una factura brillante en todos los niveles: una historia que ya es un clásico, un gran director: Bill Condon (Dioses y Monstruos, Mr. Holmes), buenos actores (destacando Emma Watson), una excelente banda sonora, una producción alucinante... y un mensaje irresistible: La Belleza está en el interior.
Un film de lujo que, comparado con su predecesor, tiene tres defectos destacables: que la Bestia sea más peluche que en las ocasiones citadas, quitándole parte de su fuerza como personaje (quizá para vender más peluches en navidad o porque la historia podía rozar la zoofilia); y que el feminismo que nos venden tampoco se note demasiado (casi es menor que en la versión de 1991). Resumiendo, que es una versión mucho más "light" que su referente.
El tercer problema es que actualmente los estudios confunden duración con calidad y parece que las películas no pueden bajar de las dos horas (esta dura 2:10 h frente a las 1:24 h de la de 1991), lo que hace que se hayan incorporado varias escenas que no estaban en la versión original y que apenas aportan cosas nuevas.
Aparte de esos tres detalles, es un estupendo espectáculo musical que se convertirá en otro clásico de Disney, con una banda sonora alucinante y una historia que, por mucho que nos sepamos, sigue teniendo la fuerza que la convirtió en un clásico incuestionable. Una película que homenajea constantemente a la versión animada.
La película también pasará a la historia por mostrar al primer personaje gay en una cinta de Disney.
Gastón y su criado
Emma Watson, una Bella incuestionable
Emma Watson es una de las mejores actrices de la actualidad y borda el papel de Bella, canciones incluidas (a pesar de su aspecto un poco estirado). Este fue uno de los primeros personajes en romper el molde de princesa Disney; siendo culta, poderosa e independiente, cualidades que mantiene en esta versión que, sin embargo, es un cuento más clásico y principesco que en la de 1991.
La actriz dota de potencia y de garra a su personaje y transmite incluso más fuerza que la Bestia, que acaba convirtiéndose, como decimos, en una especie de peluche. Lo que (unido a los efectos especiales que consiguen que no sepamos cuando estamos viendo al actor y cuando a su imagen digital), quita fuerza a la interpretación de Dan Stevens.
Luke Evans (El Hobbit, Drácula) está perfecto en su papel de Gastón, el pretendiente de Bella que se sólo se quiere a sí mismo. Sabe dotar a su personaje de la ironía que necesita sin convertirlo en un patán. Kevin Kline, como siempre, está estupendo en el papel del padre de Bella; y también destaca Josh Gad como LeFou, el sirviente de Gastón.
El resto de los actores principales prestan su voz a los personajes del castillo, que sufren la maldición que los convirtió en objetos. Son todos grandes intérpretes y están perfectos en la versión original (que recomendamos encarecidamente). Ewan McGregor es Lumière (el candelabro), Stanley Tucci es Cadenza (el piano), la cantante y actriz Audra McDonald es Madame de Garderobe (el guardarropa), y Gugu Mbatha-Raw es Plumette (el plumero). Destacamos a los veteranos Ian McKellen como Cogsworth (el reloj) y Emma Thompson como la Sra. Potts (la tetera).
Bella (Emma Watson) y su padre (Kevin Kline)
Un clásico de la literatura y del cine
La historia es básicamente la que ya conocemos. Un príncipe malcriado y egoísta recibe la visita de una anciana mendiga, en una noche helada de navidad. La anciana le pide alojamiento a cambio de una rosa, diciéndole que no se deje llevar por las apariencias porque la verdadera belleza está en el interior. El príncipe se burla del regalo y la echa de su castillo. Entonces la anciana se rebela como una poderosa hechicera que le lanza una maldición. Le convierte en una bestia (y a sus criados en objetos) y sólo podrá escapar de la maldición cuando consiga que alguien le ame por su interior y no por su aspecto bestial.
Los años pasan y otra noche helada el padre de Bella llega al castillo en busca de cobijo. La Bestia le acoge pero cuando el hombre coge lo único que se le había ofrecido (una rosa para Bella) la Bestia le encierra en su castillo. Bella se ofrece a quedarse en su lugar y entre ambos irá surgiendo una relación, cada vez más especial, alentada por los objetos animados del castillo (el reloj, el candelabro...).
A este respecto volver a destacar los excepcionales efectos especiales, que dotan de vida a todos los objetos del castillo, y la excelente dirección de producción, que convierte a la película en una joya visual, en un auténtico castillo encantado en el que cualquier objeto puede cobrar vida en cualquier momento.
Lumiere (Ewan McGregor)
Una banda sonora excepcional
Otro de los aciertos de la versión de 1991 fue su excelente banda sonora, que ya es casi tan clásica como el cuento. Sus responsables fueron Alan Menken y Howard Ashman (La Sirenita, Aladdin). Desgraciadamente, Ashman falleció en 1991. Pero Alan Menken ha compuesto tres canciones nuevas, que hacen avanzar la acción; y ha revisado los temas anteriores para encajasen mejor en la trama y la película fuera más fluída (una de las preocupaciones de Bill Condon).
Una banda sonora que sigue teniendo la fuerza de 1991, cuando la película consiguió los Oscars a Mejor Banda Sonora y Mejor Canción por Beauty and the Beast), de seis nominaciones (incluyendo Mejor Película, Sonido y otras dos nominaciones a Mejor Canción). Destacar que la categoría de Mejor Película de Animación no se crearía hasta 2001.
Destacar también la famosas escena del baile, que fue la primera vez que veíamos cómo la cámara giraba alrededor de unos personajes de animación. Una escena que se ha recreado en esta nueva versión, como no podía ser de otra forma.
El baile de Bella y Bestia
Muy pronto: 'Dumbo', 'La Sirenita'...
Estas versiones de imagen real de los clásicos de Disney (Alicia en el País de las Maravillas, Alicia a través del espejo, la Cenicienta, El libro de la Selva), van de lo terrible (las dos Alicias) a lo sublime (El libro de la Selva), pasando por películas estupendas como esta versión de La Bella y la Bestia que terminará convirtiéndose en otro clásico.
Y además arrasan en taquilla, por lo que no tardaremos en ver versiones con actores del resto de clásicos de Disney. De momento ya están anunciadas Mulan, La Sirenita, El Rey León y Dumbo. Y es que con Disney somos todos, un poco, como los niños pequeños, nos gusta ver las mismas historias una y otra vez, aunque ya nos las sepamos. Si las hacen tan bien como esta versión de La Bella y la Bestia, nada que objetar.
Y qué gran banda sonora...
La Bella y la Bestia se estrena este viernes, 17 de marzo.
Bella con el vestido amarillo
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