Ivanka Trump tendrá una oficina en la Casa Blanca y acceso a información clasificada
- La hija de Trump tiene un rol atípico y es vista como la auténtica primera dama
- No estará formalmente contratada ni recibirá salario alguno
Ivanka Trump, la hija mayor del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tendrá una oficina propia en el Ala Oeste de la Casa Blanca, según ha informado este martes su abogado.
Ivanka, que como "primera hija", ha tenido un rol atípico en la Casa Blanca desde que su padre tomó posesión del cargo, aumentará de este modo su influencia en el círculo presidencial y, se convierte, casi de facto, en la auténtica primera dama desplazando a Melania Trump
Un abogado que trabaja para la Primera Hija, Jamie Gorelick, ha confirmado a varios medios estadounidenses que Ivanka tendrá una oficina en el Ala Oeste, pero no estará formalmente contratada por el Gobierno por lo que no recibirá salario alguno ni tendrá un título oficial. Gorelick ha dicho que a Ivanka se le aplicarán las mismas reglas éticas que a los empleados de la Administración. Tendrá acceso a información clasificada y un teléfono oficial. Según ha explicado el abogado a la web Politico, el papel de Ivanka será servir como “los ojos y los oídos” del presidente.
Una habitual en actos oficiales y reuniones
En Washington ya se ha convertido en habitual ver a la hija del presidente acompañando a su padre en actos oficiales y también en reuniones con mandatarios internacionales.
Ivanka, de hecho, se sentó el pasado viernes al lado de la canciller alemana, Angela Merkel, durante su reunión en la Casa Blanca, posición que también ocupó en febrero en la visita del primer ministro canadiense, Justin Trudeau, y del japonés Shinzo Abe. El papel que representa en estos encuentros es algo que nunca ha sido aclarado completamente y el presidente Trump ha hecho oídos sordos a las críticas de nepotismo.
La hija de Trump, de 35 años, se unirá así en el Ala Oeste de la Casa Blanca a su marido, Jared Kushner, que trabaja como asesor del presidente y es un habitual en el Despacho Oval.
Ivanka es la única de los hijos de Trump que se mudó de Nueva York a Washington con su padre, aunque entonces negó cualquier interés en trabajar en la Casa Blanca.
El nombramiento de Ivanka amenaza con levantar nuevas suspicacias sobre los potenciales conflictos de intereses de la familia Trump en el poder. El presidente aseguró haber dejado todos sus negocios en manos de sus hijos y no tener ninguna comunicación sobre las decisiones que toman. Sin embargo, desde su Twitter atacó a los almacenes Nordstrom por dejar de vender la marca de ropa y complementos de Ivanka Trump y su asesora presidencial, Kellyanne Conway, pidió públicamente en televisión a los espectadores que compraran productos de Ivanka. La oficina de ética del Gobierno ya le recordó que este tipo de promoción está prohibida por ley.