Condenado un capitán destinado en Afganistán por revelación de secretos
- El capitán pidió copiar gran cantidad de información
- Un coronel italiano dio el aviso de la petición
- En su domicilio tenía abundante información reservada
La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo ha confirmado la condena a un año y medio de cárcel por delito de revelación de secretos a un capitán de Infantería destinado en Afganistán a quien le fue incautada en su alojamiento abundante documentación reservada y confidencial de la OTAN.
La sentencia considera probado que la información que se había procurado el oficial, relativa a la operación en dicho país asiático denominada ISAF, podía afectar a la seguridad de las operaciones y de las tropas desplegadas en la zona en el momento de los hechos (el año 2014), que eran mayoritariamente italianas, norteamericanas y españolas. El delito incluye el acopio de información reservada aunque, como es el caso, no se haya demostrado que fuera transmitida a nadie.
El Supremo ratifica la sentencia dictada el 22 de junio de 2016 por el Tribunal Militar Territorial Primero, que condenó al capitán por delito de revelación de secretos o informaciones relativas a la seguridad y defensa nacional a la pena de dieciocho meses de prisión y suspensión del cargo.
El capitán solicitó la información a Oficina de Seguridad
El caso se destapó el 24 de marzo de 2014, cuando el coronel español jefe de Estado Mayor de la Región Oeste en la operación multinacional "Reconstrucción de Afganistán", en la ciudad de Herat, recibió una llamada de atención de otro coronel italiano.
El militar italiano informó de que el capitán, jefe de analistas del Cuartel General de la citada Región Oeste, había solicitado unos días antes al TASO (Terminal Security Officer), un subteniente del Ejército italiano, permiso para grabar unos CD con información de la base de datos de la Sección de Inteligencia.
El citado TASO estimó que el grado de clasificación y el número y tamaño de los datos solicitados excedían de lo normal en estos supuestos, por lo que puso tal extremo en conocimiento de su superior. Éste no autorizó la solicitud formulada por el capitán y ordenó bloquear preventivamente la cuenta ISAF SECRET a nombre del referido oficial. Dos días después de formular su petición, el capitán volvió a reiterarla, poniendo de manifiesto que había dividido el material en clasificado y no clasificado, y que había reducido el número de archivos solicitados.
El TASO comprobó que el número de archivos era prácticamente el mismo, y que en las carpetas de documentos no clasificados, creadas por el capitán, se encontraba documentación que sí lo estaba, junto con otra que no presentaba la clasificación original. Como consecuencia de esos hechos, el coronel elevó parte sobre la conducta del capitán al Mando de Operaciones del Estado Mayor de la Defensa, quien abrió expediente disciplinario por una falta grave.
Así, se practicó un registro en las dependencias en las que se alojaba el capitán y se halló en el interior de las mismas "abundante documentación impresa en papel, y otra contenida en diversos tipo de soporte; información que resultó estar clasificada como NATO SECRET, ISAF SECRET y NATO RESTRICTED".
"Esta información podía afectar a la seguridad de las operaciones y de las tropas desplegadas en zona de operaciones, que en ese momento eran, mayoritariamente, italianas, norteamericanas y españolas", dicen los hechos probados en los que se sustenta la condena.