El juez pide investigar al exnúmero dos de la Policía por el pendrive de los Pujol
- El juez anula como prueba el pendrive aportado por su origen ilícito
- También investigará a un subordinado suyo, el inspector jefe Bonifacio Díez.
- Interior decidirá si toma medidas disciplinarias o revistar distinciones honoríficas
El juez del caso Pujol, José de la Mata, ha archivado la investigación sobre el origen de un pendrive de la policía con información del caso Pujol al concluir que no se puede determinar de donde salió.
En un auto, el juez de la Audiencia Nacional ordena que se investigue al exnúmero dos de la Policía Nacional Eugenio Pino y a un subordinado suyo, el inspector jefe Bonifacio Díez Sevillano, para que los juzgados de Plaza de Castilla actúen contra ellos por falso testimonio y posibles delitos de prevaricación y fraude procesal.
Además de a los juzgados ordinarios, el juez acuerda en su auto deducir testimonio que se remitirá al Ministerio del Interior para que éste determine si se deben tomar medidas disciplinarias o revisar las distinciones honoríficas que tengan Pino y Díez Sevillano, sin perjuicio del resultado de la investigación.
La Policía entregó al juez de la Audiencia Nacional, que investiga el origen de la fortuna de la familia Pujol, un pendrive "que podría contener datos" relativos a esa investigación y que fue encontrado por el inspector "ordenando los diferentes cajones y armarios de su despacho".
El juez aplica la doctrina del caso Falciani
Con esta decisión, el juez excluye definitivamente todos los documentos aportados a la causa a través de ese soporte informático por haber sido obtenidos de forma ilícita, siguiendo la reciente doctrina del Tribunal Supremo en el llamado caso Falciani.
Según esa doctrina, las pruebas obtenidas de forma ilícita por quienes desempeñan funciones públicas deben ser excluidas de los procesos para evitar contaminaciones y con ello se trata de dejar claro "a los poderes públicos y a los agentes de la autoridad, que está prohibido hacer trampas".
El juez recuerda que el pendrive "contenía archivos que habían sido copiados de un ordenador que obraba en las oficinas de la agencia de detectives" Método 3 y que cuando declaró Pino por estos hechos explicó que fue Díez Sevillano, actualmente destinado en la embajada de España en México, quien le comunicó su existencia.