Un atentado cerca de una mezquita de mujeres en Pakistán mata a una veintena de personas

• El último balance de las autoridades sanitarias es de 22 muertos y 57 heridos
• Un coche bomba ha estallado en Parachinar poco antes del rezo del viernes
• Los talibanes pakistaníes han reivindicado el atentado

Un coche bomba ha explotado cerca del mercado y la mezquita de mujeres de Parachinar

Al menos 22 personas han muerto y otras 57 han resultado heridas este viernes en un atentado cometido con un coche bomba cerca de un mercado y de una mezquita chií para mujeres de la localidad de Parachinar, en el cinturón tribal del noroeste de Pakistán y muy cerca de la frontera con Afganistán.

El atentado ha sido perpetrado poco antes del rezo del viernes con un coche bomba que estaba aparcado en las inmediaciones del templo chií y de un mercado, según ha detallado a Efe un parlamentario de la región donde ocurrió el ataque, Sajid Hussain. El ataque ha sido reivindicado por el grupo Tehrik-i-Taliban, más conocido como los Talibanes de Pakistán.

"Tenemos 22 cuerpos aquí en el hospital y 57 heridos, incluidos mujeres y niños", ha confirmado un cirujano del hospital público de Parachinar, Moeen Begum, a la agencia AFP. Un poicía local mencionado por Reuters, Ikramullah Khan, ha cifrado en 70 el número de heridos. Las autoridades locales han declarado el estado de emergencia en la zona y el Ejército ha enviado helicópteros a la zona para evacuar a los heridos.

El primer ministro paquistaní, Nawaz Sharif, ha expresado su condena en un comunicado y ha reiterado su determinación para acabar con el terrorismo: "La red de terroristas ha sido rota y es nuestra obligación nacional continuar esta guerra hasta la completa aniquilación del terrorismo en nuestro suelo", subraya en la nota.

Una zona con constantes ataques

Parachinar, zona de mayoría chií, es escenario habitual de actos violentos por parte de la insurgencia suní; en enero, una bomba acabó con la vida de 22 personas e hirió a 87 en un mercado local.

El atentado de este viernes tiene lugar después de que una serie de ataques con unos 130 muertos en la primera quincena de febrero provocase que el Ejército lanzase un nuevo operativo militar en todo el país contra la insurgencia bautizada como operación Radd-ul-Fasaad (Eliminación de la discordia).

Ese operativo es la continuación de la operación Zarb-e-Azb (Afilado y cortante), que se puso en marcha en las zonas tribales en junio de 2014 y en la que murieron unos 3.400 supuestos insurgentes y ayudó a reducir significativamente la amenaza terrorista en el país.