Patxi López propone "integrar al que pierda" tras las primarias del PSOE y no "cobrarse venganzas"

• "Todos hablamos de lealtad con el que gane. Yo añado: integremos al que pierda"
• Rechaza tanto aliarse con Podemos como "atemperar las políticas de la derecha"

Patxi López, en su escaño en el Congreso de los Diputados.

El aspirante a liderar el PSOE y exlehendakari, Patxi López, ha propuesto que el ganador de las primarias "integre" a los candidatos que pierdan y que, en lugar de que se "cobren facturas o venganzas" al día siguiente, se abogue por volver a "unir" a un partido ahora "dividido".

En declaraciones a TV3, López ha explicado que "tan importante como ver quién y cómo gana las primarias es qué hacemos al día siguiente. Y no se trata de cobrarse facturas o venganzas, sino de ver cómo integramos, sumamos y cómo recuperamos la vocación de un partido fuerte y unido".

"Si soy secretario general -ha afirmado- llamaré a los otros dos para ver cómo logramos esa integración, no tanto de Susana Díaz, Pedro Sánchez o Patxi López, sino de las diferentes sensibilidades del partido. Todos hablamos de lealtad con el que gane. Yo añado: integremos al que pierda. Es fundamental para conseguir unir a este partido".

Y es que si bien ha descartado un "riesgo de escisión", sí ha advertido de que es "posible que se mantenga la división", algo que "desangra" al PSOE, por lo que ha hecho un llamamiento a la "integración y la suma".

Niega ser la "tercera vía", sino la "vía central"

López ha reivindicado que su proyecto "no es la tercera vía, sino la vía central del partido". "No puede ser que busquemos una alianza con Podemos, ni estamos para atemperar las políticas de la derecha", ha dicho en alusión indirecta a las candidaturas de Sánchez y Díaz respectivamente. "Debemos demostrar que, entre el asalto a los cielos que proponen unos y la resignación en la que nos están instalando otros, está el proyecto socialista".

Por otro lado, sobre el debate soberanista en Cataluña, el dirigente vasco ha llamado a "parar máquinas y utilizar la política para buscar soluciones, en lugar de llegar al choque", y ha considerado que "no es posible" que el Gobierno catalán haga un referéndum.

"No hay nada legítimo por encima de la legalidad", ha dejado claro. "La ley protege de la arbitrariedad y sin respeto a la ley está la ley de la fuerza".

Por eso, ha abogado por "desmenuzar el problema grande en problemas concretos", empezando por el "reconocimiento de la singularidad, la financiación, los choques competenciales" y "hablar en serio de cómo reformar el modelo de país", mediante una reforma constitucional que sea sometida a referéndum en toda España.