Muere el poeta ruso Yevgueni Yevtushenko a los 85 años
- Ha fallecido en Estados Unidos por un problema cardiaco
- Su deseo era ser enterrado al lado de Borís Pastenkak, autor de Doctor Zhivago
- Símbolo del deshielo, en 1963 estuvo nominado al premio Nobel de Literatura
El poeta ruso Yevgueni Yevtushenko falleció hoy a los 85 años en Estados Unidos por un problema cardiaco, según informaron sus allegados a varios medios rusos.
La víspera, su esposa, María Novikova, había dicho a la agencia Tass que el poeta había sido hospitalizado en grave estado. "Murió en paz, rodeado de su familia", ha dicho este sábado la viuda a los medios rusos.
Según Serguéi Vínnikov, productor de un festival que iba a celebrarse en Moscú en honor del poeta, Yevtuchenko le expresó su deseo de ser enterrado en el cementerio ruso de los escritores, Peredélkino, al lado de donde yace Borís Pastenkak, el premio nobel y autor de Doctor Zhivago. Vínnikov dijo que el propio artista se lo dijo personalmente por teléfono el pasado 29 de marzo.
Yevtuchenko había tenido graves problemas de salud y en 2013 le fue amputada una pierna, y en 2015 fue sometido a una operación de corazón.
Una poesía antiestalinista y reflejo de la historia
Nacido en 1932 en el pueblo de Zima, en Siberia, publicó su primer poema en 1949 en el diario soviético Soviétski Sport, y unos años después se convirtió en el miembro más joven de la Unión de Escritores de la URSS.
En los años 60 ganó fama entre la juventud soviética, atraída por su estilo nuevo y fresco en la poesía, y tras haber escrito contra el estalinismo se convirtió en uno de los símbolos del deshielo de la época de Jruschov
Su poesía abordó desde episodios dolorosos de la historia del país, como el resurgimiento del antisemitismo (Babi Yar, 1961), hasta el poder enorme de la burocracia, aunque también trató los asuntos amorosos.
Fue autor de decenas de textos, entre ellos El poeta en Rusia es más que poeta (1973) o Poemas de Amor (1977), escribió también una Autobiografía precoz (1966), y más tarde incursionó en la novela y trabajó como director y guionista de cine, y en 1963 estuvo nominado al premio Nobel de Literatura.
En 1996 publicó No mueras antes de morir, a medio camino entre la ficción y el documental, donde describió con ironía la situación de la extinta Unión Soviética en los primeros años 90.
En 1991 se fue a Estados Unidos con su familia para enseñar en una universidad de la ciudad de Tulsa (Oklahoma), donde vivió hasta su fallecimiento.