Fernández Díaz denuncia que las grabaciones en su despacho fueron una "conspiración" con "intención electoral"

• El exministro apunta a una "conspiración" contra él y el PP en vísperas del 26J
• Comparece en comisión junto al exdirector de la Oficina Antifraude de Cataluña
• Se presentan como "víctimas" y dicen que sus reuniones las promovió la Policía
• De Alfonso niega saber de una "Operación Cataluña", que el ministro desconoce

Fernández Díaz denuncia que las grabaciones en su despacho fueron una "conspiración" con "intención electoral"

El exministro del Interior Jorge Fernández Díaz ha criticado ante comisión del Congreso que le investiga por el supuesto uso que habría hecho de los medios de Interior contra dirigentes catalanes independentistas que la "auténtica y única conspiración" que ha habido en torno a este caso es que se investiguen "unas grabaciones ilícitas, que se retienen durante 20 meses" antes de difundirse "debidamente editadas, fragmentadas y descontextualizadas" en la recta final de la campaña de las elecciones generales del 26 de junio.

Y ha sido tajante al señalar que quien las grabó o difundió lo hizo "con evidente intención" de perjudicarle a él y al PP. "Tenían una intención de afectar el resultado electoral", ha subrayado, repitiendo la versión que ya dio cuando se filtraron tales conversaciones, a la vez que ha lamentado que "se ha sentado un mal precedente" al crear una comisión en la que se persigue a las "víctimas" y no a los "autores intelectuales" de unas grabaciones ilícitas que, ha señalado, no tienen ningún reproche penal por conspiración, malversación o revelación de secretos.

Jorge Fernández Díaz, que ha reaparecido en el Congreso tras cuatro meses de baja por una enfermedad grave, ha comparecido para dar explicaciones sobre las conversaciones grabadas entre él y el exjefe de la Oficina Antifraude de Cataluña Daniel de Alfonso -que intervino en la comisión justo antes-, que tuvieron lugar en octubre de 2014 en el despacho oficial del ministro y en la que ambos hablan de posibles investigaciones a dirigentes de CDC y ERC implicados en el proceso soberanista y de posteriores filtraciones a la prensa.

Ambos comparecientes han subrayado que las grabaciones son "ilegales" y se han presentado como "víctimas". Fernández Díaz ha manifestado que espera que la comisión ayude a aclarar quién y por qué realizó y difundió estas conversaciones. Él ha dicho que tiene "una idea", sin querer entrar en más detalles: "Si no tengo pruebas, sería irresponsable decirlo", ha añadido.

Previamente, De Alfonso se ha desvinculado de la grabación y difusión de las conversaciones en las que se hablaba de supuestas operaciones policiales, judiciales y mediáticas contra la oposición, aunque está "convencido de que se ha hecho desde dentro del Ministerio" y que debió difundirlas el custodio de la cinta, si bien desconoce quién es.

Reuniones propuestas por la cúpula policial

Tanto el exministro como el exresponsable catalán Antifraude han negado haber pedido la reunión que mantuvieron en octubre de 2014 y cuyas grabaciones desataron la polémica sobre el supuesto uso partidista del Ministerio del Interior. Según han apuntado, fue idea de la cúpula policial.

Fernández Díaz ha dicho que se reunió dos veces con el que era jefe de la Oficina Antifraude catalana, el 2 y el 16 de octubre de 2014, a petición del que era entonces el director adjunto operativo (DAO) de la Policía, Eugenio Pino, al que ha rebatido que en su despacho se grabara "todo", tal y como el exmando policial afirmó en una entrevista.

El exministro ha asegurado que en sus cinco años al frente de Interior nunca ha despachado con el comisario ya jubilado José Manuel Villarejo y con otros agentes vinculados con la conocida como "policía política". "Ni he hablado ni sé qué cara tienen", ha sostenido.

De Alfonso, por su parte, ha asegurado que él fue invitado al Ministerio del Interior y le pareció pertinente reunirse con el entonces ministro. La cita se la propuso el inspector de policía José Angel Fuentes Gago -jefe de Gabinete de Eugenio Pino- y fue dicho inspector quien le acompañó en Interior hasta que otra persona le llevó al despacho del ministro.

El exjefe de la Oficina Antifraude de Cataluña Daniel de Alfonso comparece en la comisión de investigación del Congreso. EFE

Fernández Díaz niega "voluntad política" de investigar a Podemos

Ante las preguntas de los diputados, el exministro del Interior ha dedicado buena parte de su comparecencia a negar que en su etapa al frente del Ministerio haya intervenido para influir en investigaciones contra partidos políticos, contactando con los fiscales o al frente de una denominada "policía política" con destacados mandos policiales.

Así, el exministro del Interior ha negado haber dado a los medios de comunicación información que le pasara De Alfonso ni haber hablado con el fiscal general de Cataluña. Dado que las diligencias de jueces y fiscales son secretas, ha negado que "el ministro del Interior pueda ordenar que se abra o cierre" una investigación. "Les puedo asegurar que la Policía Nacional y la Guardia Civil son muy celosas con esas diligencias. Nuestro estado de Derecho funciona", ha enfatizado.

A preguntas de la diputada de Unidos Podemos Irene Montero también ha negado "rotundamente" haber ordenado investigar a Pablo Iglesias y a Podemos en relación al llamado informe Pisa sobre la supuesta financiación ilegal a Podemos desde Irán y Venezuela. El exministro ha desvinculado a su departamento de lo que ha denominado un "dossier de prensa" que la UDEF envió a la Fiscalía del Tribunal de Cuentas a instancias del número dos de la Polícia, Eugenio Pino, aunque ha reconocido que pudieron producirse errores en este informe.

"No ha habido ninguna voluntad política de investigar ni a Podemos ni a ninguna fuerza política; en todo caso conductas potencialmente delictivas que hayan afectado a personas concretas", ha sentenciado.

Y frente al diputado del PSOE Antonio Trevín ha negado la existencia de una "policía política" en España. "Nunca ordené ningún informe ni fui destinatario de él", ha respondido cuando le ha inquirido por la información de que la Policía dice que le entregó el informe desaparecido del caso Faisán.

También ha negado Jorge Fernández Díaz que dijera a De Alfonso en una de sus conversaciones "la Fiscalía te lo afina", como se recoge en las grabaciones. Según el exministro, lo que decía era "eso la Fiscalía a en fin..." y ha retado a someter las grabaciones difundidas a un informe pericial.

De Alfonso, al margen de una "Operación Cataluña"

Antes que el exministro, Daniel de Alfonso ha negado haber participado con Fernández Díaz en una supuesta "Operación Cataluña" contra políticas independentistas. El ahora magistrado en ejercicio ha señalado que si hubo algo parecido a la "Operación Cataluña" contra los independentistas, él no tomó parte. "Si existía, yo no estaba dentro", ha asegurado.

El exjefe de la Oficina Antifraude catalana ha reconocido que se reunió dos veces con el ministro en el despacho de este, pero ha rechazado hablar de los detalles de esas conversaciones que considera "coloquiales" porque no reconoce esas grabaciones, ya que los fragmentos distribuidos están "manipulados".

De Alfonso ha admitido que después de que saltara la polémica por las grabaciones, amenazó con "tirar de la manta", pero que ahora no quiere hacerlo, por lo que se ha negado a revelar el contenido de sus conversaciones privadas. "El ruido no hace bien y el bien no hace ruido", ha reiterado en varias ocasiones citando a San Vicente de Paúl.

De hecho, ha subrayado que "el que ha salido perjudicado" por la difusión del contenido de sus reuniones es él y cree que ha sido "utilizado" en esta polémica. "Yo fui cesado, y además tuve que pedir el traslado a otra comunidad autónoma y separarme de mi familia", ha enumerado.

Es más, ha recalcado que considera que en Cataluña había "ánimo" de "atacar políticamente a alguien" y de destituir a una persona "incómoda" como él que estaba haciendo tanto por "erradicar" la corrupción en esa comunidad.

La parte más tensa de la comparecencia tuvo lugar en el turno del diputado de ERC Gabriel Rufián, que tildó a De Alfonso de "gánster", "gallo", "mamporrero" y "lacayo del PP", lo que provocó que el juez amenazara con denunciarle por calumnias, además de réplicas como "tengo más decencia que usted" o "lo que no soy es un gallina, como usted".