Al menos diecisiete heridos en una nueva protesta en Caracas que termina con la sede de Capriles incendiada
- Los manifestantes no han podido llegar a la Defensoría del Pueblo
- La policía les ha cortado el paso con gas lacrimógeno
- El líder opositor denuncia que fue atacado "con bombas"
Una nueva manifestación de la oposición en Caracas ha dejado al menos diecisiete heridos, justo un día después de que muriese un manifestante en otra protesta. La policía ha impedido con gas lacrimógeno que la marcha llegara a la Defensoría del Pueblo, donde los opositores iban a exigir la destitución de los magistrados del Tribunal Supremo por la crisis política desatada tras quitarle (y luego recular) los poderes al Parlamento. El líder opositor Henrique Capriles ha denunciado, además, que ha sido atacado en la sede de su partido.
La manifestación, que ha congregado a miles de manifestantes en la avenida Francisco de Miranda, en el este de Caracas, intentó dirigirse hacia la sede del Defensor del Pueblo para protestar por el rechazo de esta instancia a actuar contra los magistrados del Supremo, condición indispensable para que el Parlamento pueda proceder contra ellos.
Sin embargo, fueron interceptados en su camino por la Policía Nacional Bolivariana (PNB) de Venezuela, que respondió a la marcha con gases lacrimógenos y les dispersó hacia calles aledañas.
El diputado opositor Juan José Mejías ha señalado que, a pesar de los gases lacrimógenos, continuarían en la calle expresándose "pacíficamente". "Seguiremos intentándolo cuantas veces sea necesario hasta que venzamos el piquete (de la policía) y lleguemos a nuestra meta", ha afirmado.
Tras desatarse los enfrentamientos, la dirigente opositora María Corina Machado se dirigió a la autopista Francisco Fajardo, principal arteria vial de la ciudad, con un grupo de manifestantes, por lo que el tráfico de la capital está parcialmente paralizado.
Por su parte, el primer vicepresidente del Parlamento, Freddy Guevara, encabeza otro grupo de personas que se trasladó hasta la avenida Andrés Bello, paralela a la avenida Libertador, para intentar mantener el camino hacia la Defensoría.
Entretanto, parte de la manifestación se mantiene en la avenida Libertador, donde comenzó el lanzamiento de gases lacrimógenos y que conecta el este con el centro de la capital venezolana.
Al menos 17 heridos
Al menos 17 personas han resultado heridas durante la protesta. "Hemos atendido hasta las 3.23 de la tarde (19.23 GMT) a 17 personas", ha dicho el alcalde del municipio capitalino Chacao, el opositor Ramón Muchacho a periodistas, quien ha cifrado en 10 las personas que presentaron "contusiones y traumatismos diversos".
Ha detallado que otras cuatro personas resultaron heridas con piedras o por impacto directo de gases lacrimógenos, dos por asfixia y uno con impactos de perdigones de goma. "Todos están fuera de peligro (...) No hemos recibido heridos de bala", agregó el regidor.
El diputado de oposición José Manuel Olivares ha denunciado en su cuenta en Twitter que funcionarios policiales y militares usaron botes de gas lacrimógeno caducado para "atacar" a los manifestantes, así como bombas con "gases rojos" de los que desconocían el tipo de químico que contenían.
Capriles denuncia que fue atacado "con bombas" tras la marcha
El dirigente de oposición y dos veces candidato a la Presidencia de Venezuela Henrique Capriles ha denunciado que fue atacado "con bombas" cuando se encontraba en la sede de su partido, Primero Justicia (PJ), tras asistir a una protesta antigubernamental en Caracas.
"URGENTE!!! Fuimos atacados con BOMBAS dentro del EDF! En este momento actúa BOMBEROS!", ha escrito Capriles en su cuenta de la red social Twitter.
El dirigente opositor, que el viernes fue informado de su inhabilitación para ejercer cargos públicos durante 15 años, preguntó directamente al presidente venezolano, Nicolás Maduro, si la "orden" era matarlo a él y a su equipo de trabajo.
"Cuál es la orden Maduro? Matarnos? Si algo pasa ya saben quién es el responsable y saben lo que tienen que hacer!!!", añadió el dirigente de oposición.
Casi de forma inmediata el alcalde del municipio caraqueño Baruta, el opositor Gerardo Blyde, indicó que nadie resultó herido, pese al incendio que afectó a la sede del partido.
Añadió que el fuego fue controlado y que no existe riesgo de que afecte a las edificaciones que rodean la sede de Primero Justicia.
"El fuego ya está extinguido, se hacen labores de refrescamiento para que no se vuelva a prender", explicó en declaraciones telefónicas al canal privado Globovisión.
Capriles estaba en la sede de Primero Justicia tras participar en una manifestación opositora para exigir la realización de elecciones y apoyar una iniciativa del Parlamento de remover a siete magistrados de la Sala Constitucional del Supremo.
Contra las sentencias del Supremo
La oposición se ha manifestado varias veces esta última semana en rechazo a unas sentencias que emitieron siete magistrados del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en las que despojaban a la Asamblea de sus funciones, aunque luego las suprimieron parcialmente.
El Parlamento -de mayoría opositora- calificó de "golpe de Estado" la actuación del Supremo y dio inicio a un proceso de destitución de los juristas que firmaron las sentencias.
Para llevar a cabo este proceso, se requiere que el Poder Ciudadano, que preside la Defensoría, califique de "falta grave" la actuación de los magistrados, solicitud que el defensor del Pueblo venezolano, Tarek William Saab, ya informó de que fue declarada improcedente.
El Parlamento continúa llamando a los venezolanos a manifestarse en contra de ese "golpe" y pide a la Defensoría su respaldo para proceder a "defender la Constitución", por lo que desde el jueves han intentado llegar, sin éxito, hasta su sede en Caracas.
Almagro condena el ataque contra la sede del partido de Capriles
El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, ha condenado este sábado el ataque contra la sede del partido del líder opositor venezolano Henrique Capriles en Caracas.
"Condenamos enérgicamente el atentado contra sede de @hcapriles y nos solidarizamos con quienes sufren represión por reclamar derechos", ha escrito Almagro en Twitter.
El secretario general del organismo continental también ha dicho que la inhabilitación de Capriles es una "medida típica de una dictadura que viola los derechos civiles y políticos".
Almagro ha intensificado sus críticas a los intentos del presidente venezolano, Nicolás Maduro, de aglutinar poderes y dejar inactivo el Legislativo, controlado por la oposición, y mantener un férreo control de la Justicia y los medios de comunicación.
La OEA ha intentado sin éxito de activar la Carta Democrática para denunciar la falta de garantías democráticas en Venezuela y suspender temporalmente al país como miembro, la mayor sanción de la que dispone la OEA.