Rusia acusa a Trump de atacar a Siria para imponerse a sus oponentes en EE.UU.
- Dice que su llegada a la Casa Blanca ha desatado una "descarnada lucha política interna"
- Asegura que EE.UU. es el "Estado más imprevisible" en política exterior
- Los responsables de Exteriores de ambos países se reúnen la próxima semana
- Boris Johnson cancela su visita a Moscú por el ataque químico
El ataque de Estados Unidos a una base aérea siria el pasado viernes siria sigue generando críticas dentro de Rusia, aliado del presidente sirio Bachar al Asad. La portavoz de la cancillería rusa, María Zajárova, ha acusado al presidente estadounidense, Donald Trump, de seguir una estrategia no en Oriente Próximo, sino para imponerse a sus oponentes en Washington.
El ataque "no tiene nada que ver con la política de Washington en Oriente Próximo, no es parte de una estrategia ni de un plan. Se trata de imponerse en condiciones de una descarnada lucha política interna en Estados Unidos", ha subrayado Zajárova en una entrevista a la televisión estatal rusa. "Es parte de una lucha de grupos de elite política y militar, que se han enzarzado en una pelea a vida o muerte", ha agregado la diplomática.
La acción militar estadounidense fue una respuesta al supuesto ataque químico del régimen de Al Asad a la población civil en la ciudad de Jan Sheijun en el que murieron más de ochenta personas, entre ellas treinta niños. El presidente ruso, Vladimir Putin, calificó este ataque como una "agresión" que, según Zajárova, "ha dejado en evidencia que EE.UU. es el Estado más imprevisible, y si hay algo previsible en Estados Unidos, es lo imprevisible de su política exterior".
Sí que es previsible la política exterior de otros miembros de la OTAN, en opinión de la portavoz de Exteriores, "ya que siempre ha seguido el curso impuesto desde Washington".
Reunión la próxima semana
La diplomática ha adelantado que el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, preguntará sobre las razones del ataque a su colega estadounidense, Rex Tillerson, que visitará Moscú los próximos días 11 y 12.
"Escucharemos lo que tiene que decir, le haremos preguntas. Creo que debemos tener comprensión con los procesos que allí tienen lugar (en EE.UU.), pero también hemos de subrayar lo inaceptable de este tipo de acciones", ha indicado.
Moscú insiste en que el pretexto para la represalia -la muerte de más de 80 civiles en la provincia siria de Idlib por un presunto ataque con armas químicas atribuido al régimen de Damasco- no se sostiene, al igual que las declaradas intenciones de Occidente de investigar la tragedia.
"La paradoja es que tras exigir mandar inspectores para revisar los aviones" que habían bombardeado la localidad siria de Jan Shijún, "atacaron (y destruyeron) enseguida esos mismos aparatos que querían inspeccionar", ha explicado Zajárova.
Boris Johnson cancela su visita a Moscú por el ataque químico
El ministro británico de Asuntos Exteriores, Boris Johnson, ha anunciado este sábado que no visitará Moscú, como estaba previsto, el próximo lunes, al indicar que "deplora" la defensa rusa al régimen de Bachar al Asad, a raíz del ataque con armas químicas perpetrado en Siria.
En un comunicado divulgado por el ministerio de Asuntos Exteriores, Johnson ha señalado que "los acontecimientos en Siria han cambiado la situación de manera fundamental".
El ministro ha explicado que ahora su "prioridad" es "continuar los contactos con Estados Unidos y otros aliados" a fin de construir un "apoyo internacional coordinado para (lograr) un alto el fuego en el terreno y un proceso político intensificado".
"Deploramos la defensa continuada de Rusia al régimen de (Bachar Al) Asad, incluso después del ataque con armamento químico contra civiles inocentes", ha afirmado el jefe de la diplomacia británica.
Johnson ha instado a Rusia a "hacer todo lo posible para obtener un acuerdo político en Siria y trabajar con el resto de la comunidad internacional con el objetivo de asegurar que los impactantes eventos de la pasada semana no vuelven a repetirse".
En ese comunicado difundida por Exteriores, el político conservador ha apuntado que (el secretario de estado de EE.UU. Rex) Tillerson, "sí visitará Moscú como estaba planeado y, tras la cumbre del G7, podrá trasladar un mensaje claro y coordinado a los rusos".