Alcalá no investigará el uso de instalaciones municipales para una fiesta con estríper

• El alcalde anunció dicha investigación el pasado mes de marzo
• Para el PP, el Ayuntamiento trata de "enterrar el escándalo"
• Ciudadanos pedirá la dimisión del alcalde

Foto de archivo de la toma de posesión del alcalde de Alcalá de Henares

El Gobierno tripartito de Alcalá de Henares ha rechazado este miércoles en Pleno crear, como proponía la oposición, una comisión de investigación sobre la fiesta privada con estríper que se produjo en dependencias municipales el pasado 3 de marzo. La comisión de investigación ha sido rechazada en un Pleno extraordinario con los votos del tripartito formado por el PSOE, Izquierda Unida y Somos Alcalá.

En marzo, el Gobierno municipal del alcalde Javier Rodríguez Palacios anunció que investigaría el uso de instalaciones municipales para esta fiesta, que se celebró debido a la jubilación de un trabajador municipal. El equipo de Gobierno indicó que una celebración de este tipo es "habitual" pero que en este caso derivó en "un espectáculo lamentable".

El informe de conclusiones del procedimiento de información reservada encomendado por el Ayuntamiento de Alcalá sobre la fiesta, afirma que el trabajador jubilado, uno de los cuatro encargados generales de esas instalaciones municipales, se autorizó a sí mismo el evento.

Según un comunicado del Ayuntamiento, el informe señala que "el trabajador jubilado reconoce su responsabilidad como organizador de la fiesta en la que se produjeron los lamentables hechos del pasado 3 de marzo en instalaciones del Parque Municipal de Servicios" y "deja claro en su declaración que se autorizó a sí mismo la fiesta y permitió el acceso a personas ajenas a la plantilla municipal".

El PP califica el rechazo como un "acto de cobardía política"

Para el portavoz popular en el Consistorio, Víctor Chacón, la decisión de no crear esta comisión de investigación es el ejemplo de que "el Gobierno tiene algo que ocultar" y califica este rechazo de "acto de cobardía política". Chacón ha defendido que la intención de la coalición de izquierdas es "enterrar el escándalo" como muestra, a su juicio, la convocatoria del pleno a un día de los festivos de Semana Santa y a una hora "intempestiva", según el edil.

El popular ha censurado que el Ejecutivo local no haya respondido sobre las responsabilidades de los concejales que acudieron al inicio del evento y sobre su "comportamiento ético" y sólo han contestado con "descalificaciones" a un tema que "interesa" y "preocupa a los vecinos".

"Lo que han hecho es tratar de poner un muro para que no sepamos la verdad", ha recalcado, censurando además que por "un mero formalismo" no haya quedado incluida en el orden del día del próximo pleno municipal una interpelación al concejal de obras y servicios, Carlos García Nieto, responsable de las dependencias donde se celebró la fiesta.

A juicio de Chacón, es necesario esclarecer un hecho que ha afectado al nombre de Alcalá de Henares y ha convertido al municipio en objeto de "burla y mofa".

Ciudadanos pedirá la dimisión del alcalde

Por su parte, el portavoz de Ciudadanos en el municipio, Miguel Ángel Lezcano, ha considerado que el Ejecutivo local se esconde y "elude su responsabilidad" culpando del caso a los trabajadores y ha denunciado que el Gobierno es la "antítesis de la transparencia".

"Los vecinos de Alcalá se merecen saber si se permite la celebración de espectáculos tan lamentables como estos en espacios municipales, con la presencia de concejales del ejecutivo alcalaíno", ha asegurado Lezcano en un comunicado de prensa.

Ciudadanos pedirá la dimisión inmediata del alcalde Javier Rodríguez Palacios si se demuestra que los ediles del equipo de Gobierno "tuvieron conocimiento de estos hechos y no pararon la celebración"