'Z, la ciudad perdida', los últimos grandes exploradores
- James Gray cuenta los viajes al Amazonas de Percy Fawcett en busca de una ciudad precolombina
- Una película que recupera el sabor de los clásicos de aventuras
- Se estrena este viernes, 5 de mayo
Actualmente es fácil que cuando uno vaya a lo que parece una selva perdida se encuentre un chiringuito con todas las comodidades. Pero en la primera mitad del Siglo XX todavía quedaban territorios vírgenes por descubrir, sobre todo en la selva amazónica. Un periodo que se conoció como la época de los últimos grandes exploradores. Y Z, la ciudad perdida (James Gray, 2017) cuenta la apasionante historia de uno de ellos, Percy Fawcett, que viajó al Amazonas en 1906, para cartografiar la zona, y encontró pruebas de una civilización desconocida. Y dedicó los siguientes 20 años a intentar encontrarla.
Una historia épica rodada con la fuerza y la pasión de los grandes clásicos de aventuras del siglo pasado; lo que juega a su favor, proponiéndonos una película intensa en la que un hombre se enfrenta a la naturaleza (y así mismo) para perseguir sus sueños; pero que a la vez puede decepcionar a las nuevas generaciones que esperen ver una escena de acción tras otra. Porque la épica de esta película está en los personajes, en su determinación y en cómo persiguen sus sueños.
Una película elegante, con un guion inteligente, bien rodada, con unos paisajes y una fotografía estupendos (está rodada en escenarios naturales)... pero en la que, sobre todo, brillan sus actores. Destacando al protagonista, Charlie Hunnam (Percy Fawcett); pero también a su amigo inseparable Robert Pattinson (Henry Costin), a su mujer, dispuesta a cualquier sacrificio, Sienna Miller (Nina) y a su hijo Tom Holland (Jack) al que contagia su ansia de aventuras.
Comentar también su estupenda recreación de la época con constantes pinceladas que enriquecen la narración, como las recurrentes menciones a los éxitos de otros exploradores contemporáneos (como la carrera de Ernest Shackleton y Roald Amudsen por conquistar el polo sur), la esclavitud, la inestabilidad política, la I Guerra Mundial, o la lucha por los derechos de la mujer (el movimiento sufragista al que pertenecía la mujer de Percy)
Y no podemos olvidar las referencias a otros grandes clásicos del cine, desde Aguirre, la cólera de dios (Werner Herzog, 1972), a Apocalipse Now (Francis Ford Coppola, 1979), ya que, como esos títulos míticos, esta película es, ante todo, un viaje emocional.
Resumiendo, una estupenda película que nos demuestra que lo fundamental no es conseguir nuestros sueños, sino luchar por ellos.
En busca de El Dorado
Las alusiones a El Dorado, el legendario reino cubierto de oro, que costó la vida a tantos y tantos exploradores, es otra constante de la película. Y es que, como decimos es la historia de hasta dónde puede llegar el hombre para alcanzar un sueño. Y cómo podemos contagiar esos sueños a otras personas, como Percy Fawcett hizo con su hijo en su última exploración.
La película se basa en el libro superventas (del mismo título) del escritor David Grann, que cuenta la historia real de Percy Fawcett y sus exploraciónes en el Amazonas. Un homenaje a ese espíritu aventurero que costó la vida a tantos y tantos exploradores de principios de Siglo. En la película también se nos muestra cómo millones de lectores de todo el mundo siguieron asombrados la última aventura de Percy y su hijo hasta su sorprendente conclusión.
De hecho, Percy fue tan famoso en esa época que Arthur Conan Doyle (Sherlock Holmes) se inspiró en él para el protagonista de otra de sus obras maestras, El mundo perdido (1912).
El director James Gray (El sueño de Ellis, Two Lovers) confiesa que lo que le conquistó de la historia es esa incansable determinación de Percy de intentar descubrir esa civilización perdida a pesar de las dificultades inimaginables, el escepticismo de la comunidad científica, traiciones sorprendentes y años enteros alejado de su familia.
Grandes actores
Como comentábamos esta es, ante todo, una película de personajes. Por eso era importante contar con buenos actores. Y Charlie Hunnan (Pacific Rim, La cumbre escarlata) famoso por ser uno de los moteros de Hijos de la anarquía, logra dotar de profundidad a este explorador que comienza queriendo lavar el honor de la familia y acabará obsesionándose por hacer su sueño realidad: el de encontrar una antigua civilización. Además, su personaje (como todos) envejece veinte años durante el relato y sabe reflejarlo estupendamente. De hecho el actor confiesa que acabó obsesionado con su personaje.
Sienna Miller tiene un papel breve pero fundamental para conocer a Percy. Es capaz de todos los sacrificios para que su esposo consiga sus sueños pero, a la vez, es una sufragista convencida que lucha por los derechos de la mujer. Y encima ayuda a su esposo en sus investigaciones sobre el Amazonas, de una forma determinante. Ambos actores tiene mucha química.
Pero Percy no habría conseguido regresar de sus viajes sin la ayuda de su compañero inseparable, Henry Costin, al que da vida Robert Pattinson (que poco a poco va labrándose una carrera alejado de la saga de Crepúsculo). Si Percy fuera Wyatt Earp, Costin sería su Doc Holliday. Una pareja de amigos que cuando se juntan parecen invencibles. Y Pattinson logra darle el aire de misterio que necesita el personaje.
Destacar también a Tom Holland, que da vida al hijo de Percy. El actor saltó a la fama con su fantástica interpretación en Lo imposible (J.A. Bayona, 2012) y será uno de los protagonistas de este verano gracias a la esperada Spider-Man: Homecoming, sobre todo después de la vibrante aparición del personaje en Capitán América: Civil War. Aquí está estupendo en su breve papel del chaval que termina contagiándose de los sueños de su padre.
Una aventura con el sabor de los clásicos que también ha cautivado a Brad Pitt, que ejerce de productor ejecutivo. Se estrena este viernes, 5 de mayo.