La UDEF cifra en 69 millones de euros el beneficio "no justificado" de los Pujol
- La Policía atribuye al clan un delito de organización criminal iniciado en 1990
- El líder de la trama sería el primogénito, Jordi Pujol Ferrusola
- Marta Ferrusola usaba lenguaje religioso en clave para mover capital en Andorra
La familia Pujol-Ferrusola obtuvo un "beneficio económico no justificado" de 69 millones de euros en sus cuentas de Andorra desde 1990, cuando comenzaron una operativa para ocultar "grandes sumas de origen desconocido" que responde a un "plan preconcebido y ordenado", según afirma la UDEF en un informe.
En este informe de 102 páginas, la Policía cree que la dinámica de ocultación de dinero por parte de la familia Pujol se encuadra en un delito de organización criminal, ya que actuaba "como un grupo organizado que veía desarrollando una actividad presuntamente ilícita" liderado por el primogénito, Jordi Pujol Ferrusola.
La UDEF cree que el "objetivo final" de esta actividad de blanqueo era la "búsqueda de un beneficio económico no justificado" en diferentes divisas, que cuantifica para cada uno de los padres, de los siete hermanos y de la exmujer de Jordi Pujol Ferrusola.
La cifra mayor se corresponde con el primogénito, que habría obtenido 54,5 millones de euros en pesetas, euros, dólares, marcos alemanes y libras esterlinas, seguido de su exmujer Mercé Gironés, que obtuvo 3,7 millones de euros.
Entramado liderado por Jordi Pujol hijo
Según la Policía, el expresidente catalán registró 473 millones de pesetas (2,84 millones de euros) en una cuenta de Andorra que se le atribuye, y su mujer, Marta Ferrusola, otros 683.139 euros.
Estas son las cantidades correspondientes al resto de hijos: 3,5 millones de euros de Josep, 955.253 euros de Oriol, 757.708 de Mireia, 695.657 de Marta, 711.561 de Pere y 697.761 de Oleguer.
Aunque destaca que la familia actuaba conjuntamente, la UDEF atribuye a Jordi Pujol "Júnior" un papel "líder" en la organización, ya que tenía distintas posiciones en las cuentas bancarias y era la persona encargada de "recepcionar, ingresar y posteriormente dar salida" al dinero de procedencia desconocida.
Así, "Júnior" registro una "frenética" actividad a lo largo de los años ingresando dinero en cuentas controladas por él para luego transferir cantidades a las cuentas de sus hermanos en el Principado, generalmente en la misma fecha y cuantía.
Estas operaciones "no responderían en principio a ningún tipo de lógica empresarial o comercial" y se caracterizan, según la Policía, por tres rasgos.
En primer lugar por su "asincronía", ya que no se observa la periodicidad típica de las operaciones mercantiles, en segundo lugar son "en cifras redondas, que tampoco suelen aparejarse con relaciones económicas típicas, donde la agregación de impuestos suele arrojar incluso decimales", y por último se trata de "cuantías volubles", lo que también "desdeña el criterio de aparejarlas a actividad comercial legal".
"Base de operaciones" en Andorra
La operativa de la familia Pujol-Ferrusola no se reduce ingresos sin justificar en las cuentas de Andorra, sino que el Principado se constituyó como su "base de operaciones", dice la UDEF, para hacer negocios en otros países, algunos de ellos paraísos fiscales.
El que registró más actividad internacional fue el primogénito, que hizo "numerosas transferencias internacionales desde las cuentas controladas directa o indirectamente por él" a empresas extranjeras, pero también se le atribuye este tipo de operaciones a Josep.
Tras analizar todas las operativas, la Policía concluye que "la familia actuaría como un grupo organizado que vendría desarrollando una actividad presuntamente ilícita y prolongada en el tiempo al menos desde 1990, dirigida a la apertura de cuentas bancarias en un territorio fiscalmente protegido, para ocultar y operar con dinero de origen desconocido y presuntamente ilícito".
A raíz de este informe, fechado el pasado 24 de abril, el juez que investiga a los Pujol, José de la Mata, afirmó por primera vez en uno de sus escritos, concretamente en el que envió a prisión a Jordi Pujol Ferrusola, que hay indicios de que los Pujol pudieron efectivamente cometer un delito de pertenencia a organización criminal.
Marta Ferrusola, la "madre superiora"
El informe de la UDEF también revela cómo la esposa de Jordi Pujol, Marta Ferrusola, utilizaba lenguaje en clave para relacionarse con su gestor de la Banca Reig -ahora Andbank- en Andorra, en el que se definía a sí misma como "madre superiora de la congregación".
Según un documento en poder de la Policía, hizo llegar al banco sus órdenes identificándose como "la madre superiora de la congregación". Su contacto en el banco era el "reverendo mosén" (título que se daba a los clérigos en el Reino de Aragón), al que pedía "traspasar dos misales de mi biblioteca a la biblioteca del capellán", que sería el encargado de comunicar "dónde los debe colocar".
Con este lenguaje religioso en clave, lo que estaba pidiendo la mujer del presidente catalán era un un traspaso de dos millones de pesetas a la cuenta de su hijo mayor, Jordi Pujol Ferrusola.
Tal sería el contenido de una nota manuscrita, firmada por Ferrusola el 14 de diciembre de 1995, un documento que la Fiscalía ha aportado al Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional, encargado de investigar el patrimonio familiar de los Pujol, después de que el banquero Higini Cierco Noguer compareciese ante el ministerio público para entregar documentación de la entidad Andbank.
En 2010, Marta Ferrusola tenía en Andbank una cuenta con 900.000 de euros, según un documento del propio banco que consta en el sumario.