La autoridad fiscal independiente calcula un déficit del 1,5% en 2020 frente al 0,5% del Gobierno
- El presidente de la AIReF analiza el programa de estabilidad enviado a Bruselas
- No obstante, ve "factible" el crecimiento medio en torno al 2,5% que estima el plan
La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) calcula que el déficit de las administraciones públicas españolas se situará en torno al 1,5% del PIB en 2020, un ejercicio en el que el Gobierno prevé un punto menos, el 0,5% del PIB.
El presidente de esta institución, José Luis Escrivá, ha comparecido este miércoles ante la Comisión de Economía del Congreso de los Diputados para analizar el programa de estabilidad 2017-2020 remitido por el Gobierno a Bruselas.
Este programa incluye un cuadro macroeconómico que la AIReF ve "sostenible", ya que hace "plausible" mantener los equilibrios y crecer de manera sostenida a un ritmo de entorno al 2,5% anual.
En cambio, Escrivá ha argumentado que el objetivo de déficit público es menos realista a medida que avanza el periodo, de manera que resulta "improbable" en 2017, "factible" para 2018 y 2019 y más difícil de cumplir al final del periodo.
Escrivá ha argumentado que aunque el cuadro macroeconómico para el periodo 2017-2020 es "realista", no garantiza "por sí mismo" el cumplimiento de los objetivos fiscales, principalmente debido a que el plan no incorpora nuevas medidas.
El desvío se centra en la previsión de ingresos para 2020
El desvío, según Escrivá, se centra en la previsión de ingresos para 2020, que aunque "no es imposible" de alcanzar, constituye un objetivo "ambicioso", sobre todo en lo que respecta a unos impuestos directos "excesivamente optimistas".
El presidente de la AIReF cree que no es "plausible" la estimación del Ejecutivo para los impuestos de la renta y de sociedades porque prevé crecimientos "muy por encima" del PIB nominal, algo que solo había ocurrido en periodos de inflación muy elevada.
La Autoridad también ve posible pero ambicioso el objetivo de reducción del gasto público respecto al PIB, aunque ha reconocido que cuenta con "margen" en el ahorro en intereses.
También ve "exigente" el objetivo de consumo público porque implica "sobrecumplir la regla de gasto" en todas las administraciones, mientras que en el capítulo de inversión pública considera que los niveles estimados pueden ser insuficientes para mantener "en buen estado" las infraestructuras actuales.
En materia de recomendaciones, Escrivá ha pedido que el programa de estabilidad tenga continuidad en los presupuestos de todas las administraciones, para que constituya "un verdadero anclaje" de los objetivos económicos.