El último ataque de la coalición contra fuerzas pro Al Asad levanta ampollas en Damasco y Moscú
- Así lo ha señalado el Observatorio Sirio de Derechos Humanos
- El suceso ha tenido lugar cerca del paso fronterizo de Al Tanf
La coalición internacional liderada por Estados Unidos bombardeó este jueves un posiciones militares del Ejército sirio que avanzaban por una zona próxima a Al Tanf (cerca de la frontera iraquí). Un ataque contra las fuerzas pro Bachar al Asad, que ha desencadenado la condena de los Gobiernos sirios y ruso. Damasco asegura que se trata de "terrorismo gubernamental" contra un país soberano.
Por parte de EE.UU. justifican la acción porque el avance de tropas suponían una amenaza para las fuerzas a las que apoya. Y señalan, además, que realizaron maniobras y disparos disuasorios.
El ataque causó la muerte de un número indeterminado de personas, así como daños materiales, según fuentes militares citadas por la agencia oficial SANA, que mantienen que nadie tiene el derecho de "determinar el curso de sus operaciones" antiterroristas.
Siria denuncia una "agresión evidente" de EE.UU.
La fuente ha aseverado que esta "agresión evidente" contra el Ejército muestra claramente el plan "sionista-estadounidense" en la región, en referencia a las alegaciones sirias de que Israel y Estados Unidos apoyan a los grupos terroristas. Asimismo, ha añadido que no hay ninguna justificación para el ataque.
Además, ha reiterado que las tropas sirias son la única fuerza legal que lucha contra el terrorismo junto a sus aliados en Siria y que continuarán enfrentándose a los "grupos terroristas Estado Islámico (EI) y al Frente Al Nusra".
Según informó este jueves la coalición internacional en su cuenta de Twitter, el ataque se llevó a cabo "pese a los intentos de Rusia de disuadir el movimiento prorrégimen (sirio) hacia Al Tanf, las muestras de fuerza de la aviación de la coalición y los disparos de aviso".
La coalición ha recordado que lleva operando en Al Tanf desde hace meses ofreciendo entrenamiento y asesoramiento a las fuerzas aliadas que luchan contra el Estado Islámico.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, ocho milicianos progubernamentales, la mayoría extranjeros, murieron y varios resultaron heridos el ataque contra el convoy en el que viajaban los milicianos leales al Gobierno de Damasco
Rusia califica el ataque como "totalmente inadmisible"
Rusia ha calificado este viernes como "totalmente inadmisible". "Desde luego, esto es totalmente inadmisible, se trata de una violación de la soberanía de Siria, está completamente fuera de lugar y no ayuda al proceso político", ha dicho en Ginebra Guennadi Gatílov, viceministro de Asunto Exteriores ruso, citado por la agencia rusa Interfax
Ha agregado que "cualquier acción militar que agrave la situación en Siria influye, sin duda en la marcha del proceso político, ya sea en Astaná o en Ginebra. Más aún, cuando se trata de acciones contra la fuerzas armadas sirias".
"Puedo agregar a su pregunta sobre las acciones de la coalición contra la fuerzas armadas sirias que un día antes se lanzó un ataque en el que murió un gran número de civiles en Siria, lo que también es inadmisible", ha dicho Gatílov,
Según el viceministro de Exteriores ruso todo esto "no ayuda a crear un clima favorable para el arreglo político ni para los esfuerzos por aliviar la situación humanitaria de la población siria".
Ataque del Estado Islámico en el centro de Siria
Además, este jueves la provincia central de Hama vivió una jornada especialmente sangrienta. Un ataque del EI contra posiciones de las fuerzas gubernamentales sirias se cobró la vida de al menos 82 personas, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, que indica que entre los muertos hay 29 civiles, de los cuales cuatro son mujeres y cinco menores de edad y que otros cuatro son beduinos.
La organización asegura que fallecieron por bombardeos y disparos o fueron asesinados a sangre fría.
Además, 27 miembros de las fuerzas gubernamentales perecieron en el ataque, en el que también murieron 26 yihadistas.
Esta ataque del EI coincide con un ataque de las fuerzas gubernamentales sirias contra los radicales en la vecina provincia de Alepo.