'Mil cosas que haría por ti', una atípica comedia de acción española

• Se estrena la ópera prima de Dídac Cervera, con la participación de RTVE en la producción
• Un "thriller cómico" protagonizado por Peter Vives

Carmen Barrios y Peter Vives en 'Mil cosas que haría por ti'.

Al protagonista de Mil cosas que haría por ti no ser detallista le sale muy caro. Dani (Peter Vives) pierde un reloj regalado y, como consecuencia, a su pareja. Recuperar ambas cosas le conduce a unas trepidantes y surrealistas aventuras en un mundo de prestamistas, ladrones, mafias y policías.

Así es la atípica comedia de acción que supone el debut Dídac Cervera en la dirección. Con la participación de RTVE en la producción, se estrena en salas el 2 de junio en salas. Peter Vives protagoniza una cinta con Peyu, Iris Lezcano, Cristina Brondo, Carmen Barrios y Jordi Vilches en el reparto.

“Interpreto a un tipo con tres pilares: su trabajo, su novia y su mejor amigo. Y la película empieza con uno de los tres pilares derrumbándose”, explica el actor. “Comienzan entonces esas mil cosas que es capaz de hacer por su pareja y, junto a su mejor amigo (Peyu), que es un intentó de psicólogo que no ha terminado la carrera, se convierte en un tío rutinario y conservador completamente fuera de su rutina".

Peter Vives, habitual galán televisivo, siempre comparado por su físico con Jude Law, explota por primera vez lado cómico que le acerca más al galán payaso y romántico tipo Hugh Grant. “Tenía como referentes a esos actores increíbles que admiró, como Jack Lemond o Cary Grant. O el teatro físico que hace Sergi López, que es de una comedia brutal. Admiró mucho a los actores que dominan el cuerpo y me gustaría entrenarme más en ese sentido".

Iris Lezcano interpreta a la decepcionada pareja. “Es la novia ideal hasta que se cansa de los pocos detalles de Dani”, dice la actriz. “A pesar de estar muy enamorada, tiene ese conflicto de no saber si quiere estar con alguien que tiene esa manera tan peculiar de demostrar que le quiere”.

Dídac Cervera da continuidad al estilo frenético que ya había mostrado en sus cortometrajes. “Es verdad que es una comedia un poco distinta, que no se hace mucho en España. Quería explotar el estilo alocado, en la línea metalingüística de mis cortometrajes (los personajes interpelan constantemente al espectador mirando a cámara)”, dice el director.

“Buscamos un estilo propio. Todo se inicia como una comedia romántica, de diálogos, que da paso a la acción. Es una mezcla de géneros, un poco surrealista, con un punto de thriller”, añade y confiesa que Woody Allen, por el lado cómico, y Guy Ritchie, por el ritmo vertiginoso, han sido sus referentes.