Youtube denegará la monetización de vídeos que discriminen o humillen
- También lo aplicará al uso inapropiado de contenidos infantiles
- En febrero, importantes compañías retiraron sus anuncios como castigo
YouTube ha anunciado que denegará la monetización de vídeos con contenidos que discriminen o humillen, una decisión que se incluye en la actualización de las reglas que determinarán los vídeos subidos a la plataforma que puedan gozar de anuncios para su monetización.
Estas nuevas directrices se han realizado para que los socios publicitarios vuelvan a anunciarse en YouTube sin temer que sus productos sean anunciados en vídeos que no desean. Lo hace después de que varias compañías importantes decidiesen retirar sus anuncios por haber aparecido en contenidos inapropiados.
Una de las primeras medidas que YouTube será denegar la monetización de vídeos con contenido que discrimine o humille a individuos o grupos debido a su raza, etnia, nacionalidad, religión, género, orientación sexual y más parámetros.
La plataforma de vídeos también ha querido dejar claro que el uso inapropiado de personajes de entretenimiento familiar --por ejemplo, de dibujos animados-- será también una de las razones para no monetizar los vídeos. Aunque si el vídeo es cómico o satírico, no recibirá ingresos si relaciona a estos personajes de entretenimiento con comportamientos violentos, sexuales o inapropiados.
Recuperar la confianza de los anunciantes
YouTube también pretende ayudar a los creadores de contenido a subir vídeos que sean atractivos para los anunciantes. La plataforma ha prometido dar más detalles sobre los tipos de contenido que las marcas no quieren anunciar, aunque también reconocen que no es posible cubrir todos los escenarios.
Para cumplir con este objetivo, YouTube impartirá nuevas lecciones en su página de Academia para Creadores con el objetivo de instruir a los usuarios sobre cómo crear vídeos atractivos para las marcas. En este sentido, la plataforma recuerda que aunque los vídeos cumplan con la normativa de monetización, su temática puede que sea correcta para un anunciante pero no para otro. Por ello, la meta es hacer que el contenido sea adecuado para un amplio rango de anunciantes.
Con estas medidas, YouTube pretende recuperar la confianza de los socios publicitarios. Ariel Bardi, vicepresidente de gestión de productos de Google, reconoce en el comunicado que "las fluctuaciones de ingresos han sido inquietantes", aunque también asegura que la plataforma está hablando con los anunciantes para que YouTube "siga siendo un lugar donde los creadores puedan ganar dinero".