La ONU acusa al Estado Islámico de matar a más de 160 personas para evitar que huyeran de Mosul
- Los cadáveres se acumulan en las calles, según la ONU
- El EI acusa al Ejército de usar fósforo blanco, y este lo niega
La ONU ha acusado al Estado Islámico (EI) de matar a no menos de 163 personas en Mosul (Irak) para evitar que huyeran de esta ciudad, escenario de una cruenta batalla entre los yihadistas y el Ejército iraquí, apoyado por milicias.
El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad al Hussein, ha firmado este martes en Ginebra que los cuerpos yacen abandonados en las calles.
El personal de la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas también ha infomrado a Zeid de que hay gente desaparecida tras el ataque de los yihadistas, ocurrido el pasado día 1.
“El terrorismo debe ser erradicado, pero de manera inteligente“
"El terrorismo debe ser erradicado, pero de manera inteligente, mientras se preservan los derechos humanos de todos. Recuerden que por cada ciudadano humillado, maltratado o torturado, no sólo es una persona la que se siente agraviada por las autoridades, sino toda su familia", ha declarado Zeid al inaugurar la 35 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
El EI acusa a la coalición de usar fósforo blanco
El lunes, el Estado Islámico acusó a los aviones de la coalición internacional liderada por EE.UU. de lanzar ataques con fósforo blanco, un arma prohibida internacionalmente, en un barrio del oeste de la ciudad.
La agencia de comunicación del EI, Amaq, ha difundido un vídeo en el que supuestamente se aprecia la munición de fósforo estallando sobre un complejo médico en el barrio occidental de Al Zanyili, controlado por los yihadistas.
El Ejército iraquí ha negado haber usado esta munición. En cambio, ha explicado que la aviación lanzó bombas de humo sobre el centro médico, que según su versión no albergaba a civiles, para proteger la evacuación de un gran número de personas de los disparos de francotiradores.
La oficina de información castrense ha asegurado que este tipo de medios disuasorios se ha empleado en otras ocasiones durante la batalla de Mosul contra los yihadistas, informa Efe.
La ofensiva de Mosul comenzó el pasado octubre, se alargó hasta enero en la mitad este de la ciudad y un mes después las fuerzas iraquíes lanzaron las operaciones en los barrios al oeste del río Tigris, que divide la urbe en dos. Actualmente, los yihadistas controlan sólo una pequeña porción del centro de la ciudad.