Eduardo Casanova: "Hago cine para crear mi propio mundo y huir de la realidad"

• El conocido actor debuta en la dirección con Pieles
• Sobre un grupo de personajes deformados y torturados por la sociedad

Eduardo Casanova debuta en la dirección con 'Pieles'

Gótico rosa. El universo de Eduardo Casanova (Madrid, 1991) es prácticamente monocromático, pero no camufla la dinamita que lleva dentro. Creció como actor en la televisión, pero su vocación siempre apuntaba a la dirección. Con 26 años, y un puñado de cortometrajes en la mochila, debuta en la dirección con Pieles, una propuesta bien recibida en los Festivales de Málaga y Berlín.

Pieles nace del personaje que Ana Polvorosa interpretaba en el corto Eat my shit, una chica con el ano en la cara y la boca en el culo, y multiplica la idea a una grupo de personajes con deformaciones, traumas materno-filiales y, generalmente, torturados por su entorno. Macarena Gómez, Carmen Machi, Secun de la Rosa, Eloi Costa, Jon Kortajarena y Candela Peña completan el reparto de una cinta de una gran fuerza visual y dramática.

“Es vedad que en el cine se asocia muchas veces la fealdad al malo, sucede a veces con las películas de Disney. Creo que tiene que ver con una conexión que hacemos debido a la cantidad de constructos sociales que nos rodean. Pieles lo que intenta es hacer la asociación contraria”, explica Casanova en una entrevista para RTVE.es.

Una idea sencilla, que no es novedosa en absoluto, pero expresada poderosamente dentro de una mirada absolutamente personal que demuestra que el talento de Casanova se dispara en muchas direcciones: diálogos naturales y agudos, planificación estilizada y situaciones dramáticas que siempre funcionan.

“Es un shock para el espectador. Los pequeños matices y gestos de Pieles son los que le vuelan la cabeza a tanta gente que se pregunta: ¿esto cómo me lo tomo?, ¿esto cómo lo asimilo?, ¿me siento bien?, ¿me siento mal?”, sostiene Casanova, consciente de que su película desnuda los prejuicios del espectador.

‘Nosotros somos el horror’, viene a decir uno de los personajes. “En el mundo suceden cosas horribles. El ser humano vive en guerra, mata y creo que por desgracia va a matar siempre porque somos animales. Intentamos huir de algo horrible huyendo de nuestra propia naturaleza. Y es lo que nos hace entrar en conflicto. Y eso es sano, porque evolucionas. Creo que tenemos que aceptar que somos humanos y que todo lo horrible que pasa viene de nosotros”, dice el cineasta.

Alex de la Iglesia, que le dirigió en La chispa de la vida y Mi gran noche, produce la película. Y Casanova habla de su voluntad de estilo en términos que podría suscribir su productor. “Cuando ruedo, lo que intento es crear un mundo propio y luego meter a los personajes. Ese mundo hace que los códigos, diálogos, personajes y peripecias de los personajes funcionen. En otro mundo tal vez no funcionarían. Hago cine para crear mi propio mundo e huir de la realidad”.