Tekken 7, un clásico en plena forma
- Esta séptima entrega desvela todos los secretos de la familia Mishima
- Bandai Namco vuelve con Tekken 7 para convertirlo en referencia
- No es el mejor título de la saga pero aprueba con buena nota
Regresa ocho años después la familia peor avenida de una de las sagas más míticas del mundo de los videojuegos, los Mishima. Heihachi, Kazuya y Jin siguen a la gresca de la mano de Bandia Namco, que ha estrenado la séptima entrega de su franquicia de lucha por excelencia, Tekken 7.
Como ya avanzó Katsuhiro Harada, el 'jefe' de Tekken, este nuevo título cierra la truculenta historia de los Mishima, que comenzó hace 22 años con el primer episodio para la primera generación de PlayStatiton.
Tekken 7 va más allá de un simple juego de lucha y resplandece, después de tantos años, con un modo historia que cerrará todas las incógnitas y desavenencias de los Mishima. Habrá respuestas a todas las preguntas planteadas durante estas más de dos décadas.
¿Por qué Heihachi intentó asesinar a su hijo Kazuya al tirarlo por un barranco cuando era pequeño? ¿Por qué el patriarca de la saga mató a su mujer, Kazumi? ¿Por qué su hijo y su nieto tienen el gen diabólico? ¿Por qué unos y otros no pararán hasta destruirse?...
En todo este entramado aparecerá un nuevo personaje que tendrá mucho que decir, Akuma. Cualquier aficionado a los juegos de lucha reconocerá el nombre, ya que procede de Street Figther, el título que marcó un antes y un después en el género. Este crossover por el que apuesta Bandia Namco es un aliciente más para el jugador.
Una historia que llega a su fin
Sin duda, el modo historia principal es donde más van a disfrutar los fan de la saga, ya que se despejan todas las dudas a lo largo de sus 15 capítulos, más uno especial. El entramado se desarrolla con el enfrentamiento entre Heihachi, que reaparece para hacerse cargo de 'Mishima Zaibatsu', y Kazuya, líder de la 'Corporación G'. Entre medias, Akuma tendrá algo que decir.
En plena guerra mundial de las dos corporaciones, un periodista se encarga de narrar y descubrir la historia familiar de los Mishima. Las escenas cinemáticas, de gran calidad gráfica, están insertadas de modo fluido y culminan con un combate para ir cerrando capítulo a capítulo.
Además de la historia principal, hay otro modo de historia, pero más corto, en el que iremos descubriendo lo que hay detrás de los otros 28 personajes del juego. Solo necesitaremos un combate con cada uno para descubrir sus antecedentes.
Es una novedad para ampliar la experiencia de la historia principal, que puede resultar corta. En otros capítulos de la saga había que completar un torneo entero de Tekken para averiguar los orígenes de cada guerrero. En total hay 37 luchadores de los que podremos disfrutar.
Bandai Namco ha apostado por el motor gráfico Unreal Engine 4 para desarrollar el universo Tekken 7. La dificultad de cada combate dependerá de la decisión que hayamos tomado al iniciar el juego -fácil, normal o difícil-. En general, los combates son llevables, salvo alguno que otro que se va a hacer cuesta arriba.
Los Power Crushers y los Rage Arts
Hay más novedades, pero ya dejamos el aspecto gráfico para adentrarnos en la jugabilidad y nuevas técnicas desarrolladas para el fin de este juego, el combate. Desde la firma nipona se ha apostado por dos nuevas variables dentro de la lucha: los Power Crushers y los Rage Arts.
Los Power Crushers sirven para seguir con nuestra oleada de combos, a pesar de que estemos recibiendo daños por parte de nuestro enemigo.
Mientras, los Rage Arts son una combinación letal de combos con los que podremos llevarnos la victoria en un combate que teníamos prácticamente perdido. Para realizarlos debemos tener llena la barra de ira y se ejecutan con mayor facilidad cuando la barra de vida esté cerca de su fin.
Estas técnicas permiten que un principiante de la saga tenga sus opciones ante usuarios más avanzados, aunque la experiencia siempre es un grado. Además hay una ayuda extra, si pulsamos L1 mientras ejecutamos una sucesión de golpes es más fácil encadenar de manera automática una serie de combos que harán mucho daño al rival.
En Tekken 7 no solo se apuesta por una gran variedad de personajes muy personalizables, sino que también ha tenido en cuenta lo monótono que puede resultar un juego de lucha y ha introducido hasta 20 escenarios diferentes donde batirnos en duelo. Los combates siguen siendo en 2D y está la posibilidad de esquivar los golpes con movimientos laterales.
Uno de los peros de este juego es que no hay repeticiones de nuestras ejecuciones, un clásico en Tekken.
Un juego muy personalizable
La banda sonora de Tekken 7 está a la altura de un gran juego de lucha. De todos modos, los nostálgicos podrán disfrutar de la música favorita de otros Tekken gracias a la 'Gramola', una opción de la interfaz donde podremos elegir nuestra banda sonora favorita.
Hablando de la interfaz, Bandai Namco ha diseñado un modo sencillo e intuitivo para el jugador. Donde jerarquiza los modos de juego y opciones por interés con un gran acierto.
Tampoco faltan las amplias personalizaciones de los luchadores, que van desde crear al guerrero más temible, hasta el más ridículo o estrambótico. Al iniciar el juego se cuentan con menos opciones, por eso debemos ir ganando combates para adquirir dinero y cofres que vayan ampliando el catálogo casi hasta el infinito.
Hay un modo que se llama 'Combate del Tesoro', donde podremos elegir a nuestro luchador favorito y pelear en combates rápidos para ir acumulando dinero, cofres y experiencia en la lucha. Es muy útil para lograr rápidamente dinero para las personalizaciones.
Por supuesto, no falta el modo online, ejecutado de modo sencillo y con la novedad que mientras la IA encuentra un rival acorde a nuestras necesidades, podemos ir practicando con nuestro personaje hasta que se logre el Matchmaking.
El juego está teniendo algunos problemas en este modo, pero Bandai Namco ya tiene un parche para solucionar el error.
Tekken 7 ha tenido muy en cuenta los E-Sports y una vez acabo el modo historia, el gran fuerte del título reside en ir tomando posiciones en nuestra región para participar en los torneos que irán surgiendo a través de Tekken World Tour.
Conclusión:
Tekken 7 llega para revitalizar la saga y poner fin a un ciclo dominado por la familia Mishima. El trabajo realizado con la historia principal es de lo más destacado del juego, no solo por cerrar una historia familiar de 22 años, sino porque utiliza una buena narrativa alternando una brillante cinemática con la acción de los combates.
Si tiene un pero, es su escasa duración, solo 15 episodios y un capítulo especial, que se hacen demasiado cortos. También se ha echado en falta a personajes emblemáticos de la saga como Lei Wulong, Ganryu o Michelle Chang.
Por el contrario, destaca una sencilla interfaz y multitud de posibilidades a la hora de personalizar a los 37 personajes así como una buena variedad de escenarios.
Los nuevos moviemientos -Power Crushers y Rage Arts- hacen de la batalla frenesí e igualan las fuerzas entre los noveles y los más experimentados.
El tratamiento del sonido tambén rinde a un gran nivel, no solo por la banda sonora y sus posibilidades de elección entre músicas de otras entregas, sino porque cada personaje habla en su idioma de origen, algo que puede resultar un poco extraño al principio, pero que aporta personalidad.
Tekken 7 liderará sin duda los juegos de lucha en este 2017.