La pasión y el negocio de los videojuegos se citan en el E3
- Es la feria más importante de este sector en todo el mundo
- Durante tres días, acogerá a más de 60.000 visitantes
- Además de los gigantes del sector, acuden pequeños desarrolladores
La pasión por el mundo de los videojuegos y el gran negocio que rodea a esta industria tecnológica se citan estos días en el E3, la feria más importante de este sector en todo el mundo y que durante tres días acogerá a más de 60.000 personas en el Centro de Convenciones de Los Ángeles.
Cientos de aficionados y profesionales del mundo de los videojuegos han hecho cola durante horas para ser los primeros en entrar al recinto y probar codiciados objetos de deseo como Super Mario Odyssey, Call Of Duty WWII o Assassin's Creed Origins. A numerosos fans no les importó esperar de pie hasta dos horas con tal de poder sentarse por unos instantes frente a los mandos.
"¿Dónde comienza la fila para este videojuego? ¿Cuándo empiezan las sesiones de prueba de ese otro?", eran algunas preguntas que sobrevolaban unos pasillos repletos de asistentes entre los que, de vez en cuando, se colaba algún disfraz como los de los protagonistas de los juegos Knack II o Ratchet & Clank.
Además de las demostraciones de videojuegos, el E3 expone cualquier tipo de accesorio relacionado con esta industria: desde muñecos y figuras, a fundas personalizadas para consolas, pasando por cascos de realidad virtual. Pero aunque este año por primera vez se haya abierto la feria a los aficionados con 15.000 entradas a un precio de entre 150 y 250 dólares, el E3 sigue conservando un marcado carácter profesional y de punto de encuentro para una industria que mueve mastodónticas cantidades de dinero.
Un negocio de 99.600 millones de dólares en todo el mundo
Según los datos de la consultora especializada Newzoo, en 2016 el mercado de los videojuegos generó 99.600 millones de dólares en todo el mundo. Y a pequeña escala la enorme y creciente influencia de los videojuegos se dejó sentir en Los Ángeles gracias a el E3, ya fuera con numerosos carteles y anuncios que inundaron el centro urbano o con compañías como Sony o Ubisoft escogiendo lugares emblemáticos de la ciudad como el Auditorio Shrine o el teatro Orpheum para sus conferencias previas al evento.
Más allá de la presencia de otros gigantes como Microsoft o Nintendo, el E3 también abre una ventana para pequeños desarrolladores o compañías independientes que tratan de darse a conocer y de hacerse con una porción de un pastel más que apetitoso.
Ese es el caso de Civel Games, una desarrolladora ecuatoriana que en esta E3 busca financiación para producir y comercializar su juego The Big Journey sobre las luchas entre los incas y los cañaris. "La historia es sobre Nina Samay, un joven que está en su transición a hacerse hombre y hace un viaje para salvar a su familia. Pero además de ser un viaje a través de los territorios del Ecuador es un viaje espiritual: el paso de ser un niño a un hombre, algo muy común en la cosmovisión andina", ha explicado a Efe Andrés Montesinos, uno de los responsables de Civel Games.
Este artista conceptual que creó The Big Journey junto a dos amigos explicó que estar en el E3 es "increíble" y una "súper experiencia" para ellos: "Veo mucha gente con las mismas esperanzas que nosotros, buscando grandes sueños acá, y eso realmente nos motiva mucho".
Un videojuego sobre inmigración
También de origen latino es Gonzalo Álvarez, hijo de inmigrantes mexicanos y que con Borders trata de reflejar, a través de un videojuego, los peligros mortales a los que se enfrentan quienes intentan llegar a Estados Unidos cruzando la frontera.
"En Borders empiezas de un lado y no más tienes que llegar al otro. Tienes que evitar a la 'migra', tienes que buscar agua para tomar", comentó Álvarez sobre un juego en el que, si tu personaje muere en el desierto, su cuerpo no desaparece sin más, sino que se acumula junto a cientos de esqueletos más de partidas fallidas para que los jugadores tomen conciencia de los dramas de la frontera.