El aumento de las temperaturas en España atrae a las aves africanas
- El cambio climático afecta a las zonas de distribución de las especies
- Se trata de un fenómeno que previsiblemente se incrementará en el futuro
- Así lo explica la organización conservacionista SEO/BirdLife
La progresiva subida de las temperaturas y el incremento de episodios de clima extremo en España han provocado la llegada de diversas especies de aves procedentes de África, un fenómeno que previsiblemente se incrementará en el futuro.
Así lo explica la organización conservacionista SEO/BirdLife en un comunicado, en el que alerta de que el cambio climático tiene impactos a medio y largo plazo sobre las aves, como las variaciones de las zonas de distribución de algunas especies.
Según sus datos, varios grupos de aves africanas “han desembarcado recientemente en España, posiblemente como consecuencia del calentamiento global“, y otras han experimentando un aumento en el número de observaciones, como el buitre moteado, el busardo moro, el vencejo moro y el vencejo cafre.
Estas especies crían cada vez más al norte de África e incluso son localizadas año tras año en puntos del sur de España, lo que indica que en el futuro “avanzarán las especies más mediterráneas hacia el norte, mientras disminuyen las aisladas en las zonas alpinas”, explica la ONG.
Diferentes especies
En cuanto al vencejo cafre, los expertos han detectado nuevos lugares de cría en el sur peninsular, mientras que ha aumentado el número de observaciones del vencejo moro, hasta hace poco una especie rara en España.
Otras especies comunes del norte de África, como el ratonero moro y el bulbul naranjero, han sido vistas en Cádiz en época de cría, mientras que el buitre moteado, cuyas poblaciones se concentran al sur del Sáhara, ha incrementado su presencia en España en los últimos años, a menudo en compañía del buitre leonado.
En cuanto a la tórtola senegalesa, existen nuevas localizaciones de cría en las islas Canarias, aunque su llegada y proceso de colonización puede estar más relacionado con la expansión natural de la especie por todo el noroeste de África.
Y el calamoncillo africano, que también ha extendido aunque en menor medida su área de cría a Canarias, se ha detectado incluso en otros países europeos, adonde han llegado en muchos casos “exhaustos y moribundos”, explica SEO/BirdLife.
Y en el caso de las aves marinas, algunos ejemplares de pardela de Cabo Verde han sido capturados en el islote canario de Montaña Clara, mientras que el rabijunco etéreo es citado recientemente como especie reproductora en El Hierro y posiblemente en Lanzarote.