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Princesa de Asturias de la Concordia

La Unión Europea, un proyecto que se tambalea

  • Una UE en crisis recibe el Princesa de Asturias de la Concordia
  • El proyecto europeo se tambalea acosado por múltiples crisis
  • El auge de xenofobia, la inmigración y el terrorismo, retos clave

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La Unión Europea ha sido galardonada en horas bajas con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia.
La Unión Europea ha sido galardonada en horas bajas con el Premio Princesa de Asturias de la Concordia.

A sus sesenta años, recién cumplidos, la Unión Europea parece haber envejecido de forma prematura y necesitar de un tratamiento de choque para el sinfín de achaques que amenazan con derrumbar sus valores.

Sin embargo, pese su frágil estado de salud o, precisamente por ello, la Unión Europea acumula en los últimos años los más prestigiosos galardones. Tras recibir el Nobel de la Paz en 2012, la Fundación Princesa de Asturias le ha hecho un regalo de cumpleaños tardío con un Premio a la Concordia que subraya que el proyecto europeo es artífice del período de paz más largo que ha conocido la Europa moderna y que la difusión de valores como la libertad, los derechos humanos y la solidaridad han sido un ejemplo de progreso y bienestar que proyectan esperanza aún en tiempos de incertidumbre.

Esos valores son los que están hoy en juego.

El Brexit y la desconfianza política

El proyecto europeo nació, ante todo, como el sueño de una Europa unida tras uno de los períodos más cruentos de la historia contemporánea, pero esa unión sufre hoy la salida de uno de sus miembros. El rechazo a la Unión Europea en el referéndum británico celebrado el pasado año fue la muestra más palpable de que el Viejo Continente ya no despierta la misma confianza.

Este mismo lunes Bruselas y Londres empezaron a negociar un acuerdo para la salida del Reino Unido que tendrá implicaciones para todos los europeos, tanto en lo que afecta al arreglo presupuestario como a los derechos de los ciudadanos comunitarios residentes en territorio británico y a los británicos que viven en Europa.

Informe Semanal - Brexit: la última batalla por Europa - ver ahora

Los líderes de la UE han planteado el abandono de Reino Unido como una oportunidad para avanzar en el estacando proyecto de integración europea que pasaría, según lo esbozado hasta, ahora por una Europa de varias velocidades que tiene el reto de no marginar aún más a quienes se sienten poco representados por las instituciones europeas.

Los desequilibrios económicos

Esa crisis política va estrechamente unida a la crisis económica que estalló en 2008 y que desde entonces ha estado marcada por políticas de austeridad que han llevado al empobrecimiento de una parte de la población europea y en muchos casos, al aumento de las desigualdades, según los datos de Eurostat.

Es en este contexto en el que quienes se sienten perdedores de la globalización se han vuelto en contra del proyecto europeo y las fronteras abiertas para primar políticas proteccionistas y nacionalistas, alentadas además por la crisis migratoria.

Hasta el papa Francisco, en un encuentro histórico, advirtió a los líderes europeos que la Unión corría el riesgo de "morir sin ideales". El pontífice puso de manifiesta la contradicciones del proyecto europeo e instó a aplicar "políticas que hagan crecer a toda la Unión en un desarrollo armónico, de modo que el que corre más deprisa tienda la mano al que va más despacio, y el que tiene dificultad se esfuerce para alcanzar al que está en cabeza". Solidaridad, dijo, es el mejor "antídoto" contra los populismos.

La crisis económica fomenta el ascenso en Europa de partidos populistas y de extrema derecha

El auge de la xenofobia

El caldo de cultivo -crisis económica, crisis de identidad, inmigración, estancamiento del proceso de integración europeo- ha sido perfecto para que los partidos euroescéticos y xenófobos hayan encontrado su sitio con exitosos resultados electorales.

Aunque las recientes derrotas de Geert Wilders en Holanda, Marine Le Pen en Francia han sofocado ese avance ultraderechista, aún así estas formaciones han conseguido un apoyo sin precedentes con programas que predican la disolución del proyecto europeo.

“La inmigración ha sido el chivo expiatorio de los políticos xenófobos”, indicaba a RTVE.es precisamente con motivo de las elecciones en Holanda el profesor de Historia de Europea de la Universidad de Maastricht, Pablo del Hierro.

La crisis migratoria y de refugiados

El temor al auge de los partidos racistas ha llevado a la Unión Europea a una política migratoria “vergonzosa" y "dañina”, según ha denuncia la organización Médicos Sin Fronteras en numerosas ocasiones durante los últimos dos años. Es la Europa que levanta muros, externaliza fronteras e incumple las cuotas de acogida de refugiados que huyen de la guerra.

Europa ha fracasado de forma catastrófica en su respuesta a la crisis de los refugiados durante 2015. Esta es la principal conclusión de un informe de Médicos Sin Fronteras, que acusa a la Unión Europea de no responder a las necesidades de los que huyen de las guerras e incluso dicen agravan sus problemas.

El pacto con Turquía por el que se acordó deportar a territorio turco a los solicitantes de asilo e inmigrantes que llegaran a Grecia a cambio de 3.000 millones de euros. Y todo ello pese a que la ONU denunció que la “expulsión colectiva está prohibida por la Convención Europea de Derechos Humanos”.

El terrorismo, enemigo común

Los refugiados, además, son criminalizados en un momento en el que Europa se ha convertido en objetivo de ataques terroristas. Fue en enero del 2015 cuando se inició la nueva etapa de terror con el atentado a la sede del diario satírico Charlie Hebdo. Desde entonces, Francia, Reino Unido, Alemania y Suecia han sido golpeadas con saña.

Las políticas de seguridad para hacer frente a la amenaza terrorista han abierto un debate sobre hasta qué punto invaden libertades individuales.

Aún con todos estos desafíos pendientes, la Unión Europea sigue siendo el mayor espacio de libertad y respeto a los derechos humanos y al medioambiente del mundo y el premio Princesa de Asturias a la Concordia es un acicate para así continúe. Ya lo dijo Robert Schuman, uno de los padres fundadores: “Europa no se hará de una vez ni en una obra de conjunto, sino mediante realizaciones concretas, que creen en primer lugar una solidaridad de hecho”.