Muere un joven de 16 años tiroteado en una nueva protesta de la oposición en Venezuela

• Ascienden a 92 la cifra de víctimas mortales en la ola de protestas del país
• La oposición protestaba contra el proceso Constituyente impulsado por Maduro
• La Guardia Nacional ha disparado perdigones de goma y gases lacrimógenos

Muere un menor en otra jornada de protestas en Venezuela

Un joven de 16 años ha fallecido este lunes en el estado venezolano de Carabobo (suroeste) durante una manifestación opositora, con lo que asciende a 92 la cifra de víctimas mortales de la ola de protestas antigubernamentales que sacude al país desde hace tres meses.

El Ministerio Público (MP, Fiscalía) ha señalado sin más precisiones en la red social twitter que ha designado a los funcionarios de la Fiscalía 20 de Carabobo "para investigar muerte de un joven de 16 años durante una manifestación" en la localidad de La Isabelita.

Los diputados opositores Ángel Álvarez Gil y Marco Bozo han identificado a la víctima como Rubén Darío González y aseguraron que ha fallecido "producto de un impacto de bala". Además, han achacado el hecho a la "represión" de fuerzas policiales encargadas de contener las manifestaciones o de grupos civiles afines al Gobierno.

La oposición venezolana retoma las protestas con un cierre de calles durante varias horas

Nuevos enfrentamientos contra Maduro

Manifestantes opositores y efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) se han enfrentado en varios puntos de Caracas durante un nuevo corte de calles masivo convocado por la oposición en todo el país para protestar contra el proceso Constituyente impulsado por el Gobierno de Nicolás Maduro.

En concreto, en Altamira y Las Mercedes, dos puntos del este de Caracas, decenas de jóvenes han intentado cortar la autopista Francisco Fajardo durante el "trancazo", como se conoce en Venezuela este tipo de protesta.

Miembros de la Guardia Nacional en motocicletas les han disparado perdigones de goma y gases lacrimógenos, y algunos de los manifestantes respondieron con piedras sin cejar en su empeño de acceder a la autopista.

Algunos de estos jóvenes han resultado heridos de levedad debido al impacto de perdigones, y al menos una joven fue detenida por los guardias en Altamira. Diputados opositores han informado en sus cuentas de Twitter de incidentes similares en más lugares de Caracas y otros puntos del país.

Diez horas de protestas

El "trancazo" ha comenzado a las 10.00 hora local (14.00 GMT) y se ha extendido diez horas, en el que es el corte de calles más largo convocado hasta el momento por la oposición.

Esta protesta contra el proceso Constituyente activado por el Gobierno para redactar una nueva Carta Magna ha paralizado por completo algunas zonas de Caracas y de otras importantes ciudades del país como Maracaibo, Valencia o Maracay.

Participantes en el "trancazo" y diputados opositores han publicado en sus cuentas de Twitter fotografías de las calles desiertas que habían cortado en estas y otras localidades de Venezuela.

En el este de Caracas, Efe ha constatado cómo los vecinos bloquearon por completo el tráfico en los municipios Chacao y Baruta, considerados bastiones opositores y cuyas calles estuvieron hoy cortadas con cuerdas, bolsas de basura, escombros y hierros.

La oposición pide el 'sí' en un referéndum que no reconoce el Gobierno

Esta nueva acción de desobediencia civil ha servido también para pedir el 'sí' en el referéndum convocado para el 16 de julio al margen del Poder Electoral por la oposición con el aval del Parlamento, de mayoría opositora y que califica de fraude la Constituyente de Maduro.

En la consulta, cuya legitimidad no reconoce el Gobierno, se preguntará a los venezolanos si rechazan o aprueban el proceso constituyente, si exigen a las fuerzas armadas que protejan la Constitución vigente y respalde las decisiones del Parlamento y si desean la convocatoria de elecciones generales.

Los venezolanos están convocados por el Gobierno y el Poder Electoral a las urnas el próximo 30 de julio, cuando está previsto que se elijan los integrantes de la Asamblea Nacional Constituyente que deben elaborar una nueva Carta Magna.

La oposición ve en esta iniciativa un intento de Maduro de consolidar una "dictadura" en el país sudamericano, mientras el oficialismo dice impulsar la Constituyente como salida a la crisis política y económica y para "fortalecer la revolución" bolivariana iniciada por el difunto presidente Hugo Chávez en 1999.