El Banco de España admite "errores" por no frenar la burbuja inmobiliaria y no prever la recesión
- Linde comparece en la comisión de investigación sobre la crisis financiera
- Defiende el rescate bancario frente dejar caer a las entidades no solventes
- No rescatarlas habría sido "un desastre absoluto y una hecatombe económica"
- Aún así reconoce que un "enfoque más agresivo" hubiera ahorrado dinero público
El gobernador del Banco de España, Luis María Linde, ha reconocido "errores" del organismo regulador por no haber pinchado la burbuja inmobiliaria al pensar que se corregiría de forma "suave" y por no haber sabido anticipar la recesión "tan intensa" que sufriría el país a partir de finales de 2008 y sobre todo la segunda recesión y el "fuerte impacto" que esta tuvo sobre muchas entidades de crédito a partir de 2011.
Linde ha hecho esta autocrítica, insuficiente para la oposición, durante su intervención en la comisión de investigación de la crisis financiera de España, que ha arrancado este miércoles en el Congreso de los Diputados. En ella ha explicado el informe que acaba de realizar sobre este asunto el Banco de España, que da por perdidos más de 60.600 millones de euros de dinero público del rescate bancario.
"Se hicieron cosas mal, equivocadas y hubo juicios erróneos", ha señalado Linde, aunque ha puntualizado que él "no estaba allí" y no es "justo decir que todo fueron fracasos y fallos", según recoge Efe.
El gobernador ha admitido que el Banco de España "no adoptó medidas que hubieran podido, frenar, el gran aumento del crédito" concentrado en el sector de la construcción entre 2001 y 2007. Un "crédito claramente insostenible", según ha definido Linde, quien no obstante ha asegurado que "no existían entonces" leyes que permitieran "imponer restricciones de obligado cumplimiento" en este sentido a las entidades financieras.
El responsable del organismo supervisor desde junio de 2012 ha subrayado que este aumento del crédito y su concentración en el sector inmobiliario se produjo en plena adopción del euro y con un "rápido" crecimiento demográfico que, en su opinión, "dificultaban valorar la magnitud de los desequilibrios".
El "elevado endeudamiento", un riesgo a la baja
Linde ha explicado que el Banco de España identificó "los principales problemas que se estaban acumulando" -creciente y elevado endeudamiento de familias y empresas, excesiva concentración del crédito en el sector inmobiliario, exceso de dependencia de la financiación exterior, pérdida de competitividad de la economía española, etc.- pero los consideró "riesgos a la baja".
"El Banco no anticipó una fase recesiva tan intensa como la acaecida a partir de finales de 2008, que revelaría la magnitud y la gravedad de los desequilibrios acumulados en nuestra economía", ha subrayado el gobernador, que además ha añadido que no se anticipó el impacto "crucial" que tendría la segunda recesión.
El gobernador ha concluido también que las fusiones frías de la cajas de ahorro -los sistemas institucionales de protección- "no fueron suficientes para resolver los problemas de solvencia y gobernanza" de la mayorías de ellas.
"Optimismo" por una corrección "suave" de la burbuja
Luis María Linde ha añadido, además, que hubo "errores de apreciación" sobre cómo "podrían corregirse los desequilibrios acumulados con la burbuja inmobiliaria, entre otros, los desequilibrios en los balances bancarios". El gobernador ha explicado que se pensó que se podrían corregir "de forma suave, de forma gradual" pero la realidad demostró que "esta expectativa era demasiado optimista".
El gobernador ha hecho una "reflexión adicional" al subrayar que "el intento de minimizar a corto plazo el coste de la resolución de la crisis bancaria para los presupuestos públicos mediante un enfoque gradual (...) podría haber comprometido un mayor volumen de recursos públicos que un enfoque, digamos, más agresivo o más ambicioso desde el inicio de la crisis".
En cualquier caso, Linde ha defendido que en la gestión de la crisis "el Banco no podía actuar con independencia de la evolución de nuestras finanzas públicas y las decisiones de otras autoridades".
Defiende el "menor coste" del rescate bancario
El gobernador del Banco de España ha defendido el rescate bancario de 2012 frente a las alternativas de haber dejado caer a las entidades financieras no solventes o un rescate público temprano, el conocido como 'manguerazo'.
El primer escenario, en opinión de Linde, "no era una opción razonable en términos económicos" porque habría tenido un "efecto demoledor" y porque "habría supuesto, muy probablemente, un coste mayor para los contribuyentes" ya que el Fondo de Garantía de Depósito no habría podido hacer frente a la cobertura de depósitos sin nuevas ayudas públicas.
El segundo escenario, una inyección masiva de capital temprana a la banca solo habría sido viable en 2007 o 2008 cuando las entidades financieras no lo necesitaban y cuando hubiera sido necesario no se hubiera podido asumir por el aumento del déficit y la deuda.
Linde: "El rescate se hubiera producido con o sin Bankia"
El Informe sobre la crisis financiera y bancaria en España (2008-2014) [.pdf], presentado hace ahora un mes, cuantifica en 60.613 millones de euros -el 5,6% del PIB- el coste para las arcas públicas de las ayudas concedidas a la banca entre 2009 y 2015. Una cantidad, que podría variar, pero que el Banco de España da por perdida.
Linde entiende el debate público sobre el coste para las arcas públicas del rescate pero ha insistido durante su comparecencia en que dejar caer las entidades hubiera sido "un desastre absoluto y una hecatombe económica" con un coste en términos de PIB y empleo mucho mayores.
El gobernador del Banco de España ha negado, además, que la creación de Bankia fuera la causa del rescate bancario y ha subrayado que "la necesidad del rescate hubiese sido la misma con o sin Bankia; lo mismo o muy parecido", según recoge Servimedia.
Por otra parte, Linde ha desvinculado la resolución del Banco Popular -vendido por un euro al Santander- con la crisis financiera que sufrieron sobre todo las cajas y ha insistido en que la entidad fue solvente hasta el último momento. En 2012 se detectó que necesitaba capital pero que podría cubrirlo "con sus propios medios".
El portavoz económico del PSOE, Pedro Saura, ha abogado por que se haga un informe complementario externo al Banco de España sobre la crisis y ha propuesto que haya un sistema de alertas tempranas o macroprudenciales para evitar que vuelva a suceder algo así y ha aprovechado para ensalzar las reformas financieras impulsadas durante el Gobierno de Zapatero, informa Efe.